Los casos de ictus se dispararán un 35% en 2035, ¿sabe qué hacer si sufre uno?

Cada año se producen más de 120.000 casos de ictus en España, de los cuales un 15% fallece y prácticamente la mitad queda con secuelas graves. Y eso que el 90% de los casos se puede prevenir si desarrollamos unos hábitos de vida saludables. Así, existen factores de riesgo que ayudan a la aparición del ictus, como la hipertensión, el colesterol, la diabetes o las arritmias, así como el consumo de tabaco y alcohol, el estrés, la obesidad o la vida sedentaria.

Sin embargo, los casos de ictus se espera que aumenten un 35% para 2035, según datos de la Conferencia de la Organización Europea de Accidentes Cerebrovasculares (ESOC) 2021.

Hoy se celebra el Día Mundial del Ictus y, pese a que supone la primera causa de ingresos hospitalarios y la segunda causa de muerte en España, la primera en mujeres, la mayoría de ciudadanos no sabe qué es ni qué hacer en caso de sufrirlo. “Sabemos que sólo un 10% de la población es capaz de definir lo que es un ictus y que un 50% de la población no es capaz de reconocer todavía lo que es”, tal y como afirmó el Dr. José Miguel Láinez Andrés, presidente de la Sociedad Española de Neurología (SEN), durante la jornada “Encuentro Científico, Social e Institucional sobre ictus” organizada en el Congreso de los Diputados.

Pues bien, se trata de un trastorno brusco en la circulación sanguínea del cerebro que puede ser producido por obstrucción (85% de los casos) o por hemorragia (15%).

El daño cerebral que produce dependerá de la duración del ictus y de la zona que se haya visto afectada. Por lo tanto, resulta esencial saber identificar los síntomas, y en caso de creer estar sufriendo uno no esperar.

Ni un minuto que perder

Si de repente presenta dificultad para hablar, una asimetría de rasgos faciales, pérdida de visión, de fuerza o de sensibilidad de un lado del cuerpo, o inestabilidad para mantenerse en pie o caminar, podría estar sufriendo un ictus. Si una persona sospecha que alguien puede estar sufriendo un ataque, puede detectar los síntomas pidiéndole que sonría, que responsa a una pregunta o que levante los brazos, por ejemplo.

Si se confirman las sospechas no debe perder ni un minuto, ya que el manejo de estos pacientes en su fase aguda mejora el pronóstico de la enfermedad.

Según los expertos, el pacienteno deberá desplazarse por sus propios medios, y sobre todo no conducir para acudir al hospital, siempre es mejor esperar a una ambulancia, ya que existen circuitos de código ictus extrahospitalario, que permiten que los pacientes sean dirigidos directamente a los centros con una unidad de ictus.

Se trata, en definitiva, de tratarlo lo antes posible, ya que el ictus comienza de manera brusca, con la obstrucción de un vaso, que impide la llegada de la sangre a una zona del cerebro. Inmediatamente, empiezan a morir neuronas, pero gracias a mecanismos de defensa naturales, otras resisten a la falta de riego durante un tiempo. Para salvar el mayor territorio cerebral posible, es esencial desobstruir la arteria ocluida lo antes posible.