Desmotivación

El 23% de la población ha abandonado ya sus propósitos de año nuevo

El 57% de los españoles no siente la energía vital suficiente, hecho que les impide cumplir sus objetivos para 2024

Gente fumando tabaco en terrazas de bares y restaurantes.© Jesús G. Feria.
Dejar el tabaco es uno de los propósitos clásicos de año nuevo © Jesús G. Feria.Jesús G. FeriaFotógrafos

La llegada del año nuevo se convierte en la excusa perfecta para arrancar con nuevos propósitos aunque, en la práctica, muchos de estos objetivos quedan olvidados al poco tiempo. De hecho, Según un estudio de la Universidad de Scranton, en la primera semana del año nuevo el 23% de las personas que se habían propuesto un cambio en su vida, ya habían abandonado.

Una de las razones que explican el abandono de estos propósitos de año nuevo tiene que ver con la desmotivación, ya no sólo en el terreno laboral, sino también en el personal.

Según un estudio llevado a cabo por la Confederación Salud Mental España el 57% de la población tiene sentimientos de tristeza, preocupación o miedo, lo que influye claramente en la falta de energía necesaria para el desarrollo y cumplimiento de sus objetivos personales.

Datos expuestos en el informe La Situación de la Salud Mental en España 2023 revelan que el 44,9% de los españoles se sienten preocupados por la situación actual, un sentimiento que los mantiene intranquilos y con falta de ganas para priorizar la mejora de su salud mental o física.

Justamente esta búsqueda del bienestar es la base sobre la que se erigen la mayoría de los propósitos de año nuevo, entre los que destacan populares como dejar de fumar, bajar de peso o comer mejor. Aunque, en la práctica, suelen quedar olvidados.

Objetivos realistas

Como explica Guillermo Sánchez, de la plataforma de beneficios para trabajadores Betterfly, es importante tener en cuenta ciertos aspectos a la hora de plantearse los objetivos de año nuevo si se desea que estos se cumplan.

Así, destaca que deben ser realistas: lograr un cambio radical es complicado si los objetivos son desproporcionados. Es importante buscar pequeños logros a corto plazo, que permitan valorar el progreso, aunque sea lento. Esto fomentará la motivación y evitará rendirse antes de tiempo.

La manera de enfocarlos también es clave para los resultados: a la hora de plantearlos, cuando los vemos como un resultado y no como un proceso, es posible que no se consigan. Si, por ejemplo, buscamos un cambio físico, es mejor centrarnos en lograr un cambio de hábitos a nivel general. La transformación física llegará como consecuencia.

Por último, señala ser paciente y valorar cualquier avance: no obsesionarse con el resultado e ir valorando cualquier avance por pequeño que sea es crucial para mantener la motivación. Lograr unos buenos hábitos puede tardar un tiempo, así que lo mejor es ser paciente y respetar el ritmo de cada uno así como no desistir si hay cualquier retroceso o freno en el camino.