«Los controladores de élite son el mejor modelo de curación del VIH»

1. Menos del 1% de las personas que viven con el VIH, los llamados «controladores de élite», mantienen el control del virus sin necesidad de tratamiento. ¿A qué puede deberse?

Dra. Norma Rallón (N. R.): Los resultados de las investigaciones en este grupo excepcional de pacientes sugieren que esta «condición» es una mezcla de diferentes factores (genéticos e inmunológicos, entre otros) de la persona que se infecta.

2. ¿Cómo estas personas controlan el virus sin necesidad de antirretrovirales?

N. R.: No se ha descrito un único factor asociado al control natural de la infección y los distintos estudios (incluidos los nuestros) describen varios factores (como los citados) implicados en este control, algunos con mayor relevancia como es el caso de la respuesta inmunológica adaptativa mediada por los linfocitos T. Una mejor funcionalidad de dicha respuesta se ha asociado con el control natural del VIH. Esta mejor respuesta hace posible una detección y eliminación temprana de las células que infecta el VIH (los linfocitos T CD4), antes de que el virus se replique e infecte a nuevas células. Pero hay células que no pueden eliminarse, debido a que están en un estado latente en el que el virus permanece de forma silente, lo que se conoce como «reservorio viral» y constituye la principal barrera para erradicar la infección. Los controladores de élite son también capaces de mantener niveles más bajos de este reservorio viral.

3. ¿Qué características tienen las células «natural killer» en ellos?

Dr. José Miguel Benito (J. M. B.): Las células NK actúan en las fases más tempranas de la infección, eliminando las células infectadas, y generando señales que activan otros componentes celulares pertenecientes al sistema inmunológico adaptativo que se caracteriza por actuar de forma más tardía. Nuestros hallazgos muestran la existencia de características de las células NK que son exclusivas de los controladores de élite, y que tienen que ver con una mayor capacidad para eliminar células infectadas, y para producir unas moléculas (llamadas «citoquinas») que intervienen en la comunicación con otras células del sistema inmunológico.

4. ¿Entender el control natural de la infección supondrá llegar a una vacuna o a un fármaco que cure la enfermedad?

N. R.: Los controladores de élite son el mejor modelo de curación del VIH, el más aproximado, ya que nadie se cura naturalmente de esta infección, por lo que entender cómo funciona su sistema inmunológico es el mejor punto de partida para desarrollar una vacuna o un fármaco que cure el VIH.

5. ¿Y cómo?

N. R.: Desarrollando una vacuna preventiva para personas no infectadas, o estrategias terapéuticas, para personas infectadas, que generen respuestas inmunológicas similares a las observadas en los controladores de élite.

6. ¿Es más probable que la cura esté en una vacuna o en un fármaco? ¿Y por qué?

J. M. B.: Para alcanzar la curación individual habría que diseñar fármacos no dirigidos al virus (como los que se usan actualmente, que no logran erradicar el virus), sino a potenciar la respuesta inmunológica. Para alcanzar la curación (erradicación) a nivel poblacional, se ha hecho un gran esfuerzo para desarrollar una vacuna preventiva, pero hasta la fecha ninguna ha resultado eficaz.

7. También han participado en otro estudio en el que se analiza el papel de los linfocitos T para retrasar la progresión del virus hasta la fase más avanzada de la infección. ¿Los niveles de linfocitos T en las personas portadoras de VIH son iguales que en el resto de la población?

N. R.: Los linfocitos T son células con un papel esencial en la respuesta inmunológica adaptativa. Una de sus misiones más importantes es detectar células infectadas mediante el reconocimiento de proteínas virales que se expresan en la superficie de la célula. Dado su importante papel, es fácil entender lo devastador que resulta el VIH para la persona infectada, ya que la principal célula atacada por este virus es precisamente el linfocito T CD4 , lo que supone que los niveles de estas células estén muy alterados en las personas infectadas.

8. ¿Y en los llamados controladores de élite?

N. R.: Dada su capacidad para controlar la replicación del VIH de forma natural, los controladores de élite mantienen niveles de linfocitos T CD4 similares a los de la población no infectada, con potente capacidad para responder frente al VIH y para regenerarse.

9. ¿Qué le parece el servicio gratuito de autodiagnóstico a domicilio para saber si alguien tiene VIH sin tener que ir al médico puesto en marcha por el Ministerio de Sanidad y Cesida? ¿Ayudará a reducir esa cifra de 20.000 personas que lo tienen sin saberlo o habría que visibilizar más el VIH para que la gente se conciencie y acuda al médico?

J. M. B.: Este es un serio problema epidemiológico y, por tanto, cualquier medida encaminada a reducir este problema es primordial. Esta medida debería implementarse en conjunción con una campaña de visibilización de la infección dirigida a aquellas poblaciones con más riesgo.

10. ¿En otros países se hace?

J. M. B.: Sí, a nivel europeo, la mitad de los países tienen implementado un programa de autodiagnóstico.