Rostro de mujer

Día Internacional: Las hijas que asumen el rol de cuidadoras triplican a los hijos

Hoy es el Día Internacional de las Personas Cuidadoras, un rol que sigue teniendo rostro de mujer. Solo el 9,1% de los hijos varones cuidan de sus padres con demencia

Hijas cuidadoras
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Apatía, irritabilidad, estrés, falta de sueño, cansancio, tristeza o dolor son algunos de los estados de ánimo y síntomas que sufren las personas cuidadoras. Hoy se celebra su Día Internacional, una labor que sigue siendo eminentemente femenina.

Así, según un estudio de Ace Alzheimer Center Barcelona, el 67,2% de los cuidadores de personas con demencia son mujeres.

En concreto, en el 32,4% de los casos, el rol de cuidador de la persona con demencia lo asume la esposa; en un segundo lugar, con el 27,6%, las hijas; en tercer lugar, con un 22,3% de los casos, el marido; y sólo en un llamativo 9,1%, los hijos varones. Es decir, las hijas que asumen el rol de cuidadoras triplican a los hijos.

El 8,6% restante es un porcentaje de perfiles heterogéneos entre los cuales se puede encontrar a las nueras, sobrinos, hermanos y los cuidadores profesionales.

En cualquier caso, es esencial que las personas que asumen este rol aprendan también a cuidarse a sí mismas.

''La persona con demencia refleja el estado de su cuidador. Si el cuidador no se encuentra bien, tampoco lo estará la persona a su cargo'', explica en un comunicado Pilar Cañabate, antropóloga y responsable del área de Trabajo Social de Ace Alzheimer Center Barcelona.

Convivir y asistir a diario a una persona que padece demencia constituye una tarea intensa que implica un importante esfuerzo personal, con la consiguiente carga emocional que eso conlleva.

Los síntomas de la enfermedad, como la pérdida de memoria o los cambios de humor, pueden llegar a ser muy difíciles de gestionar.

Es normal, por lo tanto, que, con el tiempo, todo esto vaya minando la salud mental de los cuidadores. Más aún si, como ocurre en la mayor parte de los casos, son familiares del paciente.

En este sentido, asumir el cansancio y aceptar que ciertas reacciones son normales cuando se viven situaciones límite es un primer paso esencial para atreverse a pedir ayuda a la familia o al exterior, como pueden ser asistentes sociales, psicólogos o asociaciones.

También resulta clave formarse para entender la enfermedad y sus necesidades, algo que casi ningún cuidador no profesional conoce. Para paliar esta necesidad, la compañía Evidenze ha lanzado ''Inolvidables'', un programa online y gratuito para familiares y cuidadores de pacientes con alzhéimer.

El propósito es cuidar a quienes cuidan con contenidos útiles, desarrollados en colaboración con profesionales médicos y del sector social, para mejorar la calidad de vida de los pacientes y de su entorno.