Entrevista

«Estimular el nervio vago es clave para la salud: calma el estrés, reduce la inflamación, mejora la digestión...»

Antonio Valenzuela es fisioterapeuta y autor del libro «Estimula tu nervio vago»

Antonio Valenzuela
Antonio ValenzuelaMIGUEL ÁNGEL MORENOLA RAZÓN

Curioso empedernido, Antonio Valenzuela es fisioterapeuta y experto en terapia manual con más de 20 años de experiencia clínica. Su último libro, «Estimula tu nervio vago», de Alienta Editorial (Grupo Planeta), aglutina las claves de algunos de los grandes propósitos que todos nos planteamos con el nuevo año: combatir el estrés, mejorar la digestión y reducir la inflamación.

¿Qué función cumple el nervio vago?

En latín «vagus» significa «deambular», y eso es lo que hace este nervio por el organismo con una misión: la de conectar el cerebro con el resto del cuerpo para ejercer el control sobre los órganos. Otra de sus funciones es la de llevar al cuerpo a la calma tras sufrir un evento estresante, de ahí que ayude a aumentar el sueño, la digestión, combatir el estrés y reducir la inflamación.

¿Cómo podemos mejorarlo?

Atendiendo los pilares básicos de la salud: la alimentación, el ejercicio, el sueño, las relaciones sociales, el contacto con la naturaleza y nuestra mentalidad. Podemos implementar técnicas sencillas basadas en la respiración, meditación, estiramientos, auto-masajes, la música y un sinfín de estrategias.

¿Y cómo debe alimentarse?

En general, con el patrón de dieta mediterránea, diversa y colorida; priorizando las verduras de hoja verde; las grasas saludables antiinflamatorias presentes en el pescado y marisco y en los huevos de gallinas «felices», así como en los frutos secos, el aceite de oliva virgen extra y el aguacate; bacterias beneficiosas de alimentos fermentados y principios activos como los presentes en el té verde, la cúrcuma, el jengibre y la familia de las brásicas (brócoli, coliflor, kale); sin olvidarnos de las setas y de la salvia, la gran estimuladora de nuestro nervio vago.

¿Qué impacto tiene el estrés en la salud?

Estamos adaptados para tolerar el estrés físico agudo, pero no para lidiar con el estrés mental crónico. En este contexto de estrés moderno es posible sufrir fatiga con la paradoja de que la glucosa y la grasa colapsen tus arterias. Tus músculos del cuello, la espalda y la mandíbula llegarán a contracturarse. Tu sistema inmunológico se centrará en inflamar como defensa a una herida que nunca se producirá, mientras que se olvidará de defendernos contra virus y patógenos. Además, el estrés constante paraliza las funciones digestivas y genera digestiones pesadas, intolerancias, hinchazón, acidez... También altera el equilibrio hormonal, provocando cambios de humor, ansiedad, pérdida de la libido, problemas de concentración y alteraciones del sueño. Incluso puede contribuir a depresión, demencia, cáncer, enfermedades cardiacas, hipertensión, diabetes...

¿Por qué el sueño es la mejor medicina?

Dormir no es un privilegio, es una necesidad. Deberíamos asegurarnos de siete a ocho horas de sueño reparador cada noche para mantener la salud.

¿Y por qué es importante respirar bien?

El cuerpo para funcionar de una forma correcta precisa de una buena oxigenación. Cuanto más relajados nos encontramos, menor será la frecuencia respiratoria.

¿Qué son las técnicas somáticas?

Se centra en las sensaciones y las experiencias físicas del cuerpo para reconectarse con ellas, liberar la tensión almacenada y regular el sistema nervioso. El objetivo es, desde el cuerpo, inundar el cerebro emocional con sensaciones y estímulos que lo regulen.

¿Qué es lo peor que hacemos al cuerpo?

Parafraseando al Dalai Lama (más o menos) «perdemos la salud para ganar dinero, después perdemos el dinero para recuperar la salud. Y por obsesionarnos con el futuro no disfrutamos del presente, por lo que no vivimos ni el presente ni el futuro. Vivimos como si no tuviésemos que morir nunca. Y morimos como si nunca hubiéramos vivido».

¿Cómo se llega al estado de «flow»?

Es ese estado en el que todo fluye de una forma fácil y feliz y podemos acceder a él cuando logramos estimular de una forma poderosa nuestro nervio vago.

¿Un consejo para 2025?

Abrazar más a los seres queridos. El contacto cálido y cercano libera oxitocina en el cuerpo, una hormona relajante y estimuladora del nervio vago.