Salud

Si un hermano tiene demencia, ¿qué le pasa al otro? El sorprendente hallazgo de un estudio en gemelos

Un análisis realizado en 90 pares de gemelos idénticos sugiere que tener un hermano (aunque no sea gemelo) que desarrolle demencia podría no ser un buen augurio, pero no para tu cerebro...

Participantes en un encuentro de gemelos en Hungría
Participantes en un encuentro de gemelos en Hungríalarazon

En 2015, España logró colocarse en el tercer puesto mundial en cuanto a nacimiento de hermanos gemelos, con una tasa media del 4% de partos. Para los genetistas, los nacimientos de gemelos son algo que celebrar. Y es que los gemelos proporcionan un tesoro de información biológica que la comunidad científica no podría obtener en ningún otro lugar. El hecho de que compartan un alto porcentaje de ADN les convierte en un activo muy valioso para ayudar a que los expertos comprendan mejor las enfermedades y otros aspectos de nuestra vida.

Por ejemplo, gracias a los estudios en hermanos gemelos hemos descubierto cómo afectan los distintos hábitos de vida al cuerpo humano. Un estudio reciente quiso saber qué pasa si una gemela come solo alimentos procesados durante una semana y la otra sigue una dieta sana. Otra investigación descubrió, gracias a un estudio en gemelos, que hasta el 60% de nuestra orientación sexual puede ser genética. Muchos análisis se han centrado en cómo afecta a la conducta que un gemelo se críe en determinadas circunstancias y el otro no. Las investigaciones son muchas y muy variadas.

Ahora, un nuevo estudio se ha centrado en cómo afecta la demencia en hermanos gemelos o, lo que es lo mismo, en personas con el mismo patrón genético. Las científicas que lo condujeron afirman haber descubierto un hallazgo sorprendente, ya que esperaban un resultado muy distinto, tal y como apuntaron en la comunicación remetida a los medios.

El objetivo de la investigación, financiada por los Institutos Nacionales de Salud (dependientes del Departamento de Salud del Gobierno de Estados Unidos, el equivalente a nuestro Ministerio de Sanidad), era evaluar la duración típica de la vida tras un diagnóstico de demencia.

En el estudio incluyó a 987 gemelos cuyos datos fueron extraídos del Registro Sueco de Gemelos. De ellos, 90 pares eran gemelos idénticos (que comparten todos sus genes) y 288 pares eran gemelos fraternos. En todos los grupos de gemelos utilizados, uno de ellos había desarrollado demencia, mientras que el otro no.

"Una de las preguntas más frecuentes cuando un familiar recibe un diagnóstico de demencia es: ¿de cuánto tiempo disponemos?", señala Jung Yun Jang, la autora principal del trabajo, que dirigió el ensayo como parte de sus estudios de doctorado en el departamento de psicología de la Universidad del Sur de California (USC), en Los Ángeles.

Como se ha observado en otros estudios, la media de vida tras el diagnóstico de demencia en el estudio en gemelos era de unos siete años, según informaron los investigadores en la revista Alzheimer's and Dementia. Y he aquí el fascinante hallazgo del estudio: si un hermano (aunque no sea gemelo) padece demencia, tu esperanza de vida también puede reducirse, aunque no padezcas demencia.

Y es que, en el caso de los gemelos idénticos del estudio, los dos vivieron unos siete años de media tras el diagnóstico de demencia de uno de ellos. Por lo tanto, el análisis sugiere que tener un hermano (aunque no sea gemelo) que desarrolle demencia podría no ser un buen augurio para la esperanza de vida, incluso si no se desarrolla demencia, según el trabajo.

"Esperábamos un resultado distinto. Esperábamos que, en los gemelos en los que uno desarrollara demencia y el otro no, la diferencia en la esperanza de vida fuera igual a la que vemos en personas no emparentadas", explica Jang.

Por qué influye en tu esperanza de vida tener un hermano con demencia

Entre los gemelos de este estudio, en concreto, ya hemos visto que la esperanza de vida tras el diagnóstico fue similar en los gemelos idénticos. Entre los gemelos fraternos, cuando a uno de ellos se le diagnostica demencia, el gemelo no afectado por la demencia tiene una esperanza de vida ligeramente más corta, en comparación con las personas que no tienen hermanos con demencia.

Pero, ¿por qué el mero hecho de tener un hermano con demencia reduciría la esperanza de vida de una persona? El equipo dice que no está claro, aunque el entorno compartido en el que crecen los hermanos podría desempeñar un papel.

Por ejemplo, si ambos desarrollaron hábitos dietéticos poco saludables o de otro tipo en la infancia, eso podría conducir a un riesgo compartido de enfermedad cardiaca décadas más tarde. Los médicos ya saben que las cardiopatías aumentan el riesgo de demencia y, en el caso del hermano no afectado por la demencia, las cardiopatías también podrían acortar la esperanza de vida.

"Suponíamos que la razón por la que una persona que ha desarrollado demencia tiene una esperanza de vida más corta es porque la demencia conduce a otras afecciones médicas que afectan a la mortalidad", afirma Jang. "Lo que vemos en cambio es que el mayor riesgo de mortalidad no se debe sólo a la demencia en sí, sino también a todo un paquete de otras influencias que la persona aporta a su enfermedad".

Gran parte de ese "paquete de influencias" comienza en los primeros años de vida. "Lo que ocurre en las primeras etapas de la vida es muy importante", afirma Margaret Gatz, coautora del estudio y profesora de psicología, gerontología y medicina preventiva en la USC. "Es posible que no puedas cambiarlo por ti mismo, pero parece que el mensaje para los padres es: asegúrate de que tu hijo come sano, de que hace ejercicio y de que recibe una educación. En realidad estás contribuyendo a que ese niño tenga menos probabilidades de desarrollar demencia 75 años después".