Educación

Arranca la primera EBAU con alumnos con asignaturas suspendidas

La Rioja es la primera comunidad donde se celebra un examen que en 2023 experimentará un cambio radical

A estos exámenes de acceso a la universidad se presentan cada año en España más de 200.000 estudiantes. El año pasado lo hicieron 261.358 alumnos, de los cuales aprobaron 246.274, el 94,2%
A estos exámenes de acceso a la universidad se presentan cada año en España más de 200.000 estudiantes. El año pasado lo hicieron 261.358 alumnos, de los cuales aprobaron 246.274, el 94,2%Brais LorenzoAgencia EFE

La convocatoria de Evaluación de Bachillerato para el acceso a la Universidad (EBAU) de este 2022 arranca hoy en España, siendo los alumnos de La Rioja los primeros en examinarse. Por el contrario, catalanes, andaluces, ceutíes y melillenses serán los últimos en hacerlo. Este año incorporan la novedad de que los alumnos de bachillerato con un suspenso podrán presentarse a esta prueba, que en 2024 dará un gran vuelco del que de momento solo se conocen sus líneas generales.

Los más de 200.000 jóvenes que se presentan a la EBAU no solo pelearán por obtener el ansiado aprobado –más del 90 % la superan–, sino por sacar una buena calificación para cursar los estudios que desean dadas las elevadas notas de corte en determinados grados (Medicina, Matemáticas...).

Este año, según recoge Efe, cuentan a su favor que el formato volverá a ser más flexible o sencillo, dado que tendrán más preguntas para elegir. Los cursos 2019-2020 y 2020-2021 estuvieron marcados por la pandemia y, en consecuencia, se adaptó el contenido de la prueba para garantizar al máximo la equidad y la igualdad de oportunidades de todo el alumnado, con independencia de las circunstancias a las que accedió a la enseñanza.

La principal novedad de este año es que los alumnos con un suspenso al acabar segundo de bachillerato podrán presentarse a la antigua Selectividad si el claustro así lo ha acordado, siempre que se cumplan determinados requisitos. Esta medida «excepcional» solo se podrá aplicar, tal y como establece el nuevo real decreto de evaluación, promoción y titulación, si el profesorado cree que el chico ha alcanzado los objetivos adecuados; que no haya habido una inasistencia continuada y no justificada; que se haya presentado a las pruebas y hecho las actividades necesarias para su evaluación y que la media aritmética de las notas en todas las materias sea igual o superior a cinco.

A efectos del cálculo de la calificación final de Bachillerato, se considerará la nota numérica obtenida en la materia no superada.

Para el curso 2023-2024 habrá muchos más cambios en estos exámenes, ya que se tendrán que adaptar a los nuevos currículos de enseñanzas mínimas aprobados este año por el Ministerio de Educación y Formación Profesional (desarrollando así el articulado de la ley Celaá o Lomloe, que entró en vigor en enero de 2021).

Futuro incierto del examen

Hace unos días, la ministra de Educación, Pilar Alegría, avanzó que el nuevo modelo de la EBAU se conocerá «en las próximas semanas» e indicó que pretende ser más homogénea y «justa» para los alumnos, respetando tanto la autonomía de las universidades como la de las comunidades autónomas.

De momento, este año, para facilitar la adaptación de los exámenes a las medidas anticovid, la evaluación tendrá, preferentemente, una duración máxima de cuatro días. En las comunidades autónomas con lengua cooficial será de un máximo de cinco días. En cada prueba, con una duración de 90 minutos, se dispondrá de una única propuesta de examen con varias preguntas. Versarán sobre las materias generales del bloque de asignaturas troncales de segundo de Bachillerato de la modalidad elegida para la prueba y, en su caso, de la materia Lengua Cooficial y Literatura.