América Latina

El presidente electo de Colombia explicado en cinco claves

Fue revolucionario en el M19 y uno de los diputados más incisivos en la denuncia de los vínculos de políticos colombianos con el narco

El Presidente electo de Colombia Gustavo Petro
El Presidente electo de Colombia Gustavo PetroCarlos OrtegaAgencia EFE

Gustavo Petro se ha convertido en el primer presidente de Colombia de izquierdas en los últimos casi 214 años. El candidato progresista que más cerca estuvo de alcanzar la jefatura del Estado fue Jorge Eliécer Gaitán, asesinado en 1948 dando lugar a disturbios conocidos como el “Bogotazo”. Petro se suma a la lista cada vez más larga de gobernantes de izquierdas que han tomado el poder en América Latina en los últimos años, desde Andrés Manuel López Obrador en México hasta Gabriel Boric en Chile. Al igual que otros presidente latinoamericanos, como Lula da Silva, Dilma Rousseff y Pepe Mugica, Petro también tiene un pasado vinculado a la revolución. Militó en su juventud en la guerrilla el M19 en su región natal, en Zipaquirá, cerca del Caribe colombiano. Estos son cinco aspectos de su vida y su carrera política que ayudan a comprender la personalidad del presidente electo de Colombia.

Un líder amado y odiado

Gustavo Petro, lo tomas o lo dejas. El futuro jefe del Estado colombiano es un líder que no ha dudado a lo largo de su carrera en denunciar como diputado y senador los vínculos de políticos colombianos con líderes del narcotráfico. Son muchos los que le detestan y han tratado de apartarlo del escenario público. De hecho, durante la campaña tuvo que suspender sus apariciones y quedarse aislado ante el temor de un posible magnicidio tras denunciar un intento de asesinato. Hace más de veinte años, el propio Petro quiso reunirse con Carlos Castaño, el jefe de los paramilitares, para convencerlo de que no lo matara. En la historia reciente de Colombia hemos visto asesinatos constantes de ex guerrilleros reconvertidos en dirigentes de partido políticos, como pasó a partir de 1984 con los integrantes de Unión Patriótica.

Alcalde de Bogotá

En 2012 fue elegido alcalde de Bogotá, donde pudo desarrollar algunas de las inquietudes como dirigente de izquierdas. Una de ellas fue la desprivatización del servicio de recogida de basuras de la ciudad. El proceso de transición dejó Bogotá sumida en el caos durante tres días. Sus enemigos políticos usaron este episodio para atacarlo hasta el punto de que finamente fue destituido por orden del procurador general Alejandro Ordóñez e inhabilitado para ejercer cargos públicos durante quince años. Sin embargo, miles de personas salieron durante varios días a las calles para defender al alcalde y la Corte Interamericana de Derechos Humanos revirtió esa medida y ordenó su restitución en 2014.

Venezuela

¿Será Petro un presidente cercano al régimen de Nicolás Maduro como en el pasado lo fueron Lula da Silva en Brasil y Cristina Fernández de Kirchner en Argentina? El analista político Carlos Suárez lo da por hecho. “Petro ha sido inspirador de la revolución bolivariana, admirador de Chávez y propulsor de toda la izquierda suramericana. Llegará a imponer la agenda por la que ha luchado toda su vida: ilegal y legal”. Por su parte, otro politólogo colombiano, Álvaro Villarraga, cree que Petro tiene un programa moderado y descarta que vaya a convertirse en un presidente “radical”. Su política con respecto a Venezuela pasa en primer lugar por el restablecimiento de las relaciones diplomáticas, interrumpidas desde hace años y que ha dificultado la gestión de la llegada de millones de inmigrantes a suelo colombiano.

Carácter despótico y pragmático

Sus detractores temen que se convierta en un líder caudillista. De momento, algunos de los que han trabajado con él en la alcaldía de Bogotá han señalado su carácter despótico y autoritario, arrollador frente a las masas pero tímido e introvertido en las distancias cortas. Pero también es una persona directa y decidida, imbuido de un sentido pragmático de las cosas. Su visita con Carlos Castaño, el jefe paramilitar, da una idea de hasta qué punto es capaz de atajar los problemas de frente. “Donde los demás ven riesgos, Petro ve oportunidades”, ha dicho José Cuesta, amigo del ya presidente electo. “Es, en el buen sentido de la palabra, un oportunista”, ha dicho Cuesta.

Asalto al palacio de Justicia

En 1985 Colombia vivió uno de los episodios más sangrientos de su historia reciente con el asalto al palacio de Justicia en Bogotá perpetrado por el M-19, la guerrilla de la que Petro formaba parte. En aquel ataque murieron 101 personas. Petro tuvo la buena mala suerte de ser arrestado. Según ha contado, fue trasladado a unas caballerías del ejército en la capital donde fue torturado. Pasó casi dos años en prisión hasta que fue liberado. Decidió entonces regresar a su actividad revolucionaria hasta que en 1990 el M19 se desmovilizó tras un acuerdo político.