
Hostelería
Un cliente critica la actitud de los camareros de un bar y recibe una dura respuesta: “Solo falta darnos latigazos”
El establecimiento no se quedó callado ante la reseña y respondió a la clienta, sacando a la luz su mala educación

Los trabajadores de la hostelería tienen que aguantar constantes faltas de respeto en su trabajo. Ya sea por el consumo excesivo de alcohol o por simple falta de educación, algunos clientes se creen por encima del bien y del mal. Ya sea con palabras o acciones, algunas actuaciones dejan mucho que desear, especialmente al conocer que el trabajador tiene que estar delante del público muchas horas y en ocasiones sin apenas descanso.
Hay gente sin ningún tipo de vergüenza desde el primer minuto, como un grupo que se presentó en un restaurante con ensaladas del Mercadona para comer, mientras que otros van mostrando su verdadera cara según avanza el servicio. Jesús Soriano, conocido en redes sociales por su cuenta de 'Soy Camarero' en 'X', compartió un nuevo caso de falta de educación que hizo estallar al restaurante 'La Quinta', que no dudó en sacar los colores a un cliente.
Una mala reseña desencadenó todo
No es una sorpresa que un restaurante reciba una mala reseña. De hecho, pueden darse por muchos motivos, algunos puntuales y que no implican que sea mal restaurante. En este caso fue la siguiente: "Nunca había estado en un bar con camareros con tan pocas ganas de trabajar". El comentario fue acompañado de una estrella sobre cinco, una nota de un uno en comida y en servicio mientras que otorgó un cuatro a nivel de ambiente.
Una respuesta sin miramientos
Lo que quizás no esperaba Inés, nombre por el que la llama el establecimiento, es recibir respuesta. Tras saludar educadamente, pasaron a responder con un toque irónico pero firme: "Tienes razón, los camareros de antes aguantaban en silencio las faltas de respeto. Nosotros no", explican sin titubeos. El comentario no se detiene ahí y recuerda las duras condiciones laborales con las que afrontan su actividad: "Con 35 grados, tormenta y la terraza llena, trabajamos sin parar. Lo mínimo que merecemos es respeto".
El restaurante dejó caer que a esta clienta únicamente le interesaba el interés propio, sin tener un mínimo de empatía: "Solo falta darnos latigazos, que parece que es lo que quieres". Hay clientes que solo piensan en ellos mismos y no entienden que hay más personas en el restaurante y tienen el mismo derecho a ser atendidas. Otro caso diferente sería si los trabajadores no se mueven, pero no parece este caso sin conocer el contexto completo.
La petición del establecimiento
"La terraza estaba llena precisamente por nuestras ganas y por nuestra gente del barrio", el restaurante responde al mensaje inicial de las ganas de trabajar en el último párrafo. Si realmente fuera cierta la ausencia de ganas, parece extraño que la terraza esté llena. El mensaje acaba con una clara petición hacia Inés: "El equipo te pide, con toda educación, que no vuelvas". Las personas no tienen derecho a aguantar ciertos comportamientos por el mero hecho de estar trabajando.
Una de tantas reseñas surrealistas
No es el primer caso de este tipo que sale a la luz, ni el peor. La misma cuenta reveló otro peor. Un grupo dejó este mensaje: "No hagáis caso a las reseñas, sitio pésimo, comida pésima, y servicio pésimo. Uno de los peores sitios a los que he ido" y se llevó una respuesta que hace sentir más vergüenza todavía: "Os habéis ido sin abonar la cuenta, 17 personas, de uno en uno habéis ido desapareciendo", fueuna parte del contundente mensaje.
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