Jubilación

Cuándo me puedo jubilar: este es el mejor momento del año

La fecha que elijas para jubilarte también pesa en la cuantía: no solo cuentan los años cotizados o la edad, el calendario puede darte unos euros más… o menos

Cuándo me puedo jubilar: este es el mejor momento del año
Cuándo me puedo jubilar: este es el mejor momento del añoUnsplash

Elegir cuándo jubilarse no es solo una cuestión de cumplir años. El mes que marques en el calendario puede sumar -o restar- dinero a tu pensión. Por eso muchas dudas se concentran entre julio y diciembre, y en la eterna comparación: ¿mejor el 31 de diciembre o el 1 de enero?

Edad legal y cálculo en 2025: el marco que te condiciona

Cuándo me puedo jubilar: este es el mejor momento del año
Cuándo me puedo jubilar: este es el mejor momento del añoUnsplash

Con la reforma en marcha, en 2025 la edad ordinaria es de 66 años y 8 meses para quienes no alcanzan 38 años y 3 meses cotizados. Quien sí supere ese umbral puede retirarse a los 65 sin penalización. La base reguladora se obtiene sumando 300 meses (25 años) de bases y dividiéndolos entre 350; para cobrar el 100% de esa base, este año se exigen 36 años y 6 meses de cotización. Estas reglas no son un detalle: determinan cuánto de tu vida laboral entra en el cálculo y qué porcentaje se te aplica antes, incluso, de que el IPC haga su efecto.

El papel del IPC: un "multiplicador" que llega por calendario

La lógica es sencilla: cuando el IPC del ejercicio es alto, las bases de cotización se actualizan al alza y la prestación arranca desde un nivel algo más favorable. No se trata de una magia de diciembre ni de un truco fiscal, sino de cómo la Seguridad Social sincroniza salarios pasados con precios presentes. De ahí que la segunda mitad del año suela ser un periodo atractivo: históricamente concentra más tensiones de precios y, en consecuencia, puede dejar una pensión inicial ligeramente superior frente a idénticas carreras que se jubilan en meses de IPC más suave.

¿Qué meses convienen de forma general?

No existe un "mes perfecto" para todos los casos, pero la recomendación técnica que circula en los despachos es clara: solicitar entre julio y diciembre suele ser ventajoso porque captura bases actualizadas en un entorno de IPC normalmente más alto. Esto no corrige lagunas ni suple años de cotización, pero sí puede inclinar la balanza en el arranque de la prestación. La diferencia no es descomunal, pero es recurrente: eliges una vez la fecha y la cobras todos los meses.

¿Diciembre o enero? Lo que realmente cambia

La comparación que más dudas genera es entre jubilarse a finales de diciembre o esperar a enero. Si el año que cierras registra IPC elevado, causar derecho en diciembre te ancla a un cálculo inicial más alto y, además, te beneficiarás de la revalorización general de enero como el resto de pensionistas. Si, por el contrario, las previsiones apuntan a un IPC superior en el año siguiente, esperar puede tener sentido. Es, por tanto, una decisión caso a caso que debe tomarse mirando datos de inflación y tu historia de cotización.

Jubilación anticipada y coeficientes: por qué alargar unos meses puede pagar

Cuando se adelanta la jubilación, entran en juego coeficientes reductores ligados a los meses de anticipo y a los años cotizados. Son recortes permanentes. En ese contexto, prolongar actividad hasta la segunda mitad del año tiene un doble efecto: reduce o elimina penalizaciones y, además, te posiciona en un periodo en el que el IPC tiende a ser más favorable. Si tu margen temporal es estrecho, conviene evaluar trimestre a trimestre, qué pierdes (por coeficiente) y qué puedes ganar (por IPC y porcentaje aplicable).

Cómo decidir tu fecha con método

La elección no debería hacerse "a ojo". Primero, verifica tu edad legal y el porcentaje que te corresponde según los años cotizados. Después, estima tu base reguladora con el simulador de la Seguridad Social para ver un rango de pensión realista. Por último, contrasta con el comportamiento reciente del IPC y con las previsiones que baraja el propio Gobierno: si estás en la horquilla julio-diciembre y cumples condiciones, el calendario suele jugar a favor; si dudas entre diciembre y enero, compara el IPC del año que cierras con el que se espera abrir.

En conclusión, la mejor ventana para jubilarse suele estar entre julio y diciembre, porque el IPC acostumbra a empujar al alza el arranque de la pensión. Ahora bien, tu edad, años cotizados, posibles penalizaciones y la dinámica concreta de precios del año mandan sobre cualquier regla general. Decide con números delante: base reguladora, porcentaje por cotización y panorama de inflación. Elegir el mes correcto es un gesto pequeño con impacto mensual… y de por vida.