Sanidad

Las enfermedades de transmisión sexual se disparan en España

Según un estudio del Colegio Oficial de Médicos, aumentan en jóvenes entre 20 y 24 años. La caída del VIH tiene como efecto rebote los casos de sífilis y clamidia

Herpes genitales enfermedades ETS
Evolución de las ETS en EspañaAntonio CruzLa Razón

La preocupación ante el incremento de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) viene de largo, aunque ahora, con los datos sobre la mesa, los peores pronósticos se hacen realidad. Según un informe del Comité Científico sobre Covid y Patógenos emergentes del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid (ICOMEM), cada vez son más jóvenes los que presentan alguna ETS.

Un dato que corrobora la Organización Mundial de la Salud (OMS) al afirmar que cada año se diagnostican más de 450 millones de casos nuevos. Esta nueva tendencia responde a varios factores. En primer lugar, que cada vez se realizan más pruebas para evitar la transmisión, y por tanto, existe un mayor control de las mismas, pero la otra cara de la moneda demuestra que la aparición de nuevos mecanismos de profilaxis como la PrEP, la cual protege frente al VIH, ha hecho que muchos jóvenes se relajen, reduzcan el uso de otros métodos de profilaxis y se disparen los casos de sífilis, clamidia y gonorrea, entre otros.

Los profesionales sanitarios más próximos a este problema reflejan su preocupación ante cifras «escalofriantes» de aumento de la incidencia de estas enfermedades, afectando no sólo a grupos de particular riesgo si no a la población general. Y es que se trata de infecciones serias que pueden provocar graves daños y que, además, no genera inmunidad el haberlas pasado, por lo que las reinfecciones son posibles y frecuentes. Tampoco existe la mutua exclusión entre ellas, ya que un mismo individuo puede tener más de una ETS al mismo tiempo.

Los datos establecen tasas de incidencia que van desde 1,66 episodios por cada 100.000 de población para el linfogranuloma venéreo (LGV) hasta los 48,36 episodios por 100.000 de población para la infección por Clamidia trachomatis. En cuanto al LGV, se comunicaron 453 casos en España en 2019. Igual que en Europa, un 99% eran HSH y un 70% de los casos fueron notificados en Cataluña (tasa 1,24/ 100.000 habitantes).

Según reza el informe del ICOMEM, existe un claro predominio de hombres entre los casos comunicados y las tasas son particularmente elevadas entre la población de entre 20 y 24 años. El hecho de focalizar el análisis en estas ETS es que no se conocen los datos de incidencia nacional de otras ya que no son enfermedades sujetas a vigilancia a través de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica.

Asintomáticas

Una de las que actualmente más preocupa es sífilis, sobre la que la OMS, en el año 2020, aseveró que existían 7,1 millones de casos en el mundo. En España, los datos de sífilis comunicados por la autoridad sanitaria central fueron de 5.822 casos (88,7% varones) en 2019, lo que supone una tasa de 13,29 casos por 100.000 habitantes. Las cifras se elevan a 30,81 casos en la población de edades comprendidas entre los 20 y los 24 años. Este impresionante aumento, según ICOMEM, puede deberse en parte a una mejoría en los métodos de recolección de la información.

Otra de las ETS que hoy en día suponen un importante problema de salud pública es la gonorrea. En los últimos años ha experimentado un incremento continuado en la incidencia de esta infección gonocócica. En nuestro país se reportaron una tasa de 28,88/100.000 habitantes en 2019, lo que supone un incremento de un 25,2% con respecto a 2013. La tasa en hombres (79,7%) es superior a la que se observa en las mujeres y la tendencia es creciente para ambos sexos, con un porcentaje anual de cambio de un 26,6% en hombres y de un 35,7% en mujeres, y un incremento significativo en todos los grupos de edad

Por si fuera poco, según los expertos que han elaborado este estudio del Colegio Oficial de Médicos de Madrid, las tasas de resistencia a azitromicina, que ese utiliza para combatir esta infección, han ido aumentando progresivamente en España y se estiman entre el 5-30%.

También hacen hincapié en otra bacteria especialmente preocupante: la clamidia. Esta es la causa más común de ETS tanto en hombres como en mujeres. Un 70% de las infecciones por chlamydia trachomatis en mujeres y un 50% en hombres son asintomáticas, lo que supone una complicación más a la hora de prevenir la trasmisión. En España, la infección genital deesta bacteria muestra un aumento progresivo de la incidencia en los últimos años. Se notificaron 17.718 casos en 2019, lo que supone una tasa de 44,18 episodios por cada 100.000 habitantes (54,4% en mujeres). En nuestro país, más de un 40% de los casos son menores de 25 años.

Como se indicaba al inicio de este artículo, la bajada en número de transmisiones de VIH en los últimos años y, por lo tanto, la relajación de utilización de métodos profilácticos, podría ser el motivo fundamental del aumento de otras ETS. Como dato curioso, durante las décadas de 1980 y 1990, en el inicio de la pandemia de VIH, el mecanismo más frecuente de transmisión del VIH en España, a diferencia de la mayoría de países del mundo, no fue la vía sexual, sino el uso de drogas inyectadas (UDI).

En la actualidad, según el último informe sobre la infección por VIH en España, un 81,7% de los nuevos diagnósticos fueron de transmisión sexual. La transmisión en hombres que tienen sexo con hombres (HSH) fue la más frecuente, 56,3%, seguida de la transmisión heterosexual, que supuso un 25,4%,

Otra de las ETS que más preocupa es el herpes genital. Según recoge ICOMEM, se estima que a nivel mundial hay entre 400 y 500 millones de personas de 15 a 49 años portadoras del VHS , mientras que en España, los expertos estiman que entre un 10-15% de población adulta pueda ser portadora del virus. Eso sí, se ha producido un incremento a partir de la década del 2010, que parece haberse estabilizado en torno a los 50.000 casos anuales en España. El pico de prevalencia de la infección suele producirse entre los 15 y los 25 años.

Ante esta compleja situación, los profesionales sanitarios reconocen que «los caminos que siguen los pacientes con sospecha de ETS hasta su adecuado diagnóstico y tratamiento se conocen mal en España».

Por ello, insisten en proveer información de utilidad al conjunto de las comunidades autónomas acerca de los recursos y el estado de la atención de las ETS a nivel nacional . De esta manera se podrá para facilitar la toma de decisiones en materia de gestión de este tipo de patologías, así como acometer los cambios normativos necesarios para garantizar que las innovaciones en materia de prevención y diagnóstico precoz de estas enfermedades, que aproximadamente suponen unos 1.000 millones de euros anuales al sistema sanitario, puedan implementarse en todo el territorio.

[[H2:Los graves riegos de las «chemsex»]]

Las «chemsex», fiestas en las que se mezcla sexo con drogas, han experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Cada vez más jóvenes lo practican y la mayoría, confiados por estar en tratamiento PrEP (profilaxis prexposición, con el que se protege ante la transmisión del VIH), huyen de usar otras medidas profilácticas. Esto ha provocado que aumenten otra serie de ETS.

Los estupefacientes que principalmente se consumen en estas prácticas son, principalmente, GHB (o éxtasis líquido), mefedrona y metanfetamina, una «bomba explosiva» que ha aumentado tras la pandemia y que practican, sobre todo, treintañeros, de alto nivel educativo, social y económico. De hecho, estas se relacionan con la expansión de la viruela del mono (Monkeypox), que en España ha dejado 7.541 casos. Un 98% eran hombres con una media de edad de 37 años.