Medicamentos

El fármaco contra el cáncer de mama que reduce el tratamiento a 5 minutos y que ya financia Sanidad

El medicamento sustituye horas de administración intravenosa por una sola inyección subcutánea en el muslo

La imagen muestra un tumor primario de cáncer de mama (rosa) y los tumores metastásicos/secundarios (púrpura).
La imagen muestra un tumor primario de cáncer de mama (rosa) y los tumores metastásicos/secundarios (púrpura).CHALMERS | FARIBA ROSHANZAMIR AND YEN STRANDQVISTCHALMERS | FARIBA ROSHANZAMIR AN

El Ministerio de Sanidad ha dado luz verde a la financiación de Phesgo, un nuevo tratamiento contra uno de los tumores de mama más agresivos y que afecta principalmente a mujeres jóvenes, que se administra en minutos con una única inyección subcutánea. Se trata de una nueva forma de administrar la combinación de los anticuerpos monoclonales de Perjeta (pertuzumab) y Herceptin (trastuzumab), una opción terapéutica que ya existe, pero que hasta ahora se administraba por vía intravenosa y requería horas. Con el nuevo medicamento se reduce a solo unos minutos las horas que precisa el tratamiento estándar, manteniendo el mismo perfil de seguridad y eficacia. "Con ello hemos humanizado el tratamiento, de forma que las pacientes, que no acababan de desengancharse del hospital, se sienten menos enfermas", ha señalado José Ángel García, oncólogo médico del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.

El cáncer de mama HER2 positivo es una forma particularmente agresiva que ataca sobre todo a mujeres jóvenes. Esta clase de tumores representan alrededor del 20 % del total de cánceres de mama -unos 6.000 en España. Las pacientes requieren un tratamiento prolongado en el tiempo, entre un año, si tienen la enfermedad en un estadio precoz, o varios, si ya está en fase avanzada, con lo que precisan de muchos ciclos. Con la administración intravenosa, que necesita de la colocación de una vía periférica o de un catéter venoso central, los tiempos pueden prolongarse hasta 9 horas y media la primera dosis y otras 5,5 la segunda de mantenimiento. Sin embargo, gracias a la nueva opción, las pacientes ya no tendrán que pasar horas en los hospitales de día para recibir su tratamiento porque todo eso se simplifica a entre 5 y 8 minutos, los que dura el único pinchazo con el que se introducen a la vez los dos anticuerpos.

“Hay que tener en cuenta que el cáncer va a ser algo muy común en nuestra sociedad y, concretamente el cáncer de mama, que es un tumor con más de 35.000 nuevos casos al año en nuestro país. Por lo que estos tratamientos tan prolongados es preciso que sean compatibles con el día a día de los pacientes, para que puedan ir a trabajar, cuidar de sus hijos o hacer las tareas cotidianas. Y para eso, sin duda, necesitamos que las terapias no solo sean eficaces, evitando que la enfermedad progrese, sino también que sean cómodas y que ayuden a conciliar la vida personal de los pacientes y, por supuesto, sin aumentar los efectos secundarios", afirma la doctora Eva Ciruelos, oncólogo médico de la Unidad Cáncer de Mama del Hospital 12 de Madrid

Otra ventaja del tratamiento es que la administración subcutánea es menos invasiva que la intravenosa que a veces suele acarrear riesgos de hemorragia o infección, de modo que apenas implica pequeñas molestias en la zona del pinchazo. La administración intravenosa, para la que puede requerirse una vía periférica o el uso de dispositivos de acceso venoso (como el Port-a-cath o el PICC), puede asociarse a complicaciones y molestias graves para el paciente, como mayor riesgo de hemorragia, arritmia cardiaca, malposición, embolismo gaseoso, neumotórax o hemotórax y, menos raro, daño de los vasos o de los nervios. También bacteriemias o trombosis. El doctor García Sáenz matiza que "para pacientes a los que no se les puede implantar un dispositivo de este tipo, este fármaco es la única forma que tienen para recibir su medicación contra el cáncer". Además, estas mujeres podrán recibir el tratamiento en cualquier hospital cercano, sin necesidad de desplazarse al de referencia.

Estudio FeDerica

La aprobación Phesgo se ha basado en los resultados del estudio fase III FeDeriCa, que demostró que el tratamiento producía niveles no inferiores de pertuzumab y trastuzumab en sangre, en comparación con la administración intravenosa de los dos medicamentos. Su perfil de seguridad, en combinación con quimioterapia, era comparable a la administración IV de pertuzumab y trastuzumab en combinación con quimioterapia. No se identificaron nuevas señales de seguridad, incluyendo ninguna diferencia significativa en la toxicidad cardíaca. Once hospitales españoles han participado en los estudios clínicos que avalan la aprobación de esta nueva vía de administración. “La oncología española siempre está a la cabeza en investigación clínica y, gracias a la participación que hemos tenido en los ensayos con esta vía de administración, tenemos experiencia con este tratamiento subcutáneo, pese a que en España haya llegado tan tarde su financiación”, destaca la doctora Eva Ciruelos,.