Ciencia

María Blasco responsabiliza al Gobierno de la falta de fondos en el CNIO, el mayor centro de investigación del cáncer en España

Blasco, que lleva al frente del centro desde el año 2011, defiende su gestión y pone su cargo en manos del patronato del centro

María Blasco, Directora del CNIO
María Blasco, Directora del CNIOA. R. RoldánFotógrafos

«El mayor centro de investigación del cáncer en España está al borde del precipicio». Así comenzaba la información que abordaba la compleja situación que enfrentan los trabajadores del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) debido a la falta de equipos que fue publicada por "El País". Según el artículo, llevan «años» sin los recursos necesarios para trabajar, y el centro sufre un déficit de 4,5 millones de euros. Varios jefes de departamento acusan directamente a la directora, María Blasco, de «abandonar el centro».

A primera hora de la mañana de ayer, Blasco se reunió con varios medios para explicar, según su perspectiva, la situación real del CNIO y tratar de salir airosa de esta polémica, que parece una guerra de intereses internos dentro de la organización. En relación con la financiación, y según recoge Efe, la directora señaló que siempre necesita invertir en equipamiento para renovar los equipos, pero lamentablemente, dispone de una asignación pública anual de solo un millón de euros, lo cual considera «claramente insuficiente» y obliga al centro a priorizar las compras «según las necesidades más urgentes».

Para mostrar fortaleza ante los grupos internos críticos con su gestión, Blasco compareció acompañada por los vicedirectores del centro, Óscar Llorca y Óscar Fernández Capetillo, y el director del programa de Biotecnología, Fernando Peláez. No obstante, en ningún momento planteó su dimisión. Aclaró que su contrato «se renueva cada cinco años por el Patronato del CNIO tras una evaluación previa como directora». «Son ellos los que deben decidir si debo continuar o no, pero las dos últimas valoraciones han sido muy positivas», afirmó.

Asimismo, puntualizó que el CNIO es sometido cada dos años a una evaluación por parte de «un comité externo muy exigente que también nos guía en la toma de decisiones, como qué grupos de investigación deben continuar o cuáles deben dejarse». Según Efe, su última evaluación fue en 2023, y este año se emitirá un nuevo informe.

En el artículo, Manuel Valiente, investigador del cáncer cerebral en el CNIO, afirmaba que «estamos en una situación límite», ya que la falta de microscopios confocales «es como quedarse ciego ante el cáncer». Ante estas críticas por la falta de inversión en equipamiento, Blasco fue clara al señalar que «siempre se debe invertir», pero que con los fondos del CNIO «es imposible comprarlo todo». «Siempre se elige lo más urgente, y se decide en un proceso altamente participativo entre los responsables del centro», añadieron Peláez y Llorca.

También ofrecieron ejemplos concretos. «Lamentablemente, este año el CNIO ha adquirido un espectrómetro de masas que ha costado más de un millón de euros y ha agotado los fondos. Sin embargo, es un equipo de primera línea en la tecnología de la proteómica y una compra muy importante que el centro debía hacer», explicó Peláez.

«Obviamente, el centro necesita otros equipos esenciales, como los microscopios confocales, pero precisamente por eso este año hemos aprobado el alquiler de uno de ellos. Es una de las prioridades de compra en cuanto haya recursos disponibles», sentenció Blasco.

En cuanto a la financiación del centro, Blasco recordó que el CNIO se nutre principalmente de la subvención nominativa, una asignación procedente de los Presupuestos Generales del Estado, que se encuentra congelada desde hace 20 años. «Los cuatro millones de euros de déficit del centro son consecuencia de haber estabilizado al personal eventual, lo que ha supuesto un aumento de los gastos de personal», concluyó Blasco.

La ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, de quien depende el CNIO, salió al paso de la crisis en la que está sumido este organismo garantizando el compromiso del Gobierno de España para que el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) tenga «todos los instrumentos necesarios para seguir haciendo la mejor ciencia», al tiempo que destacó que el ente es «uno de los mejores centros de investigación de nuestro país». «No me van a encontrar nunca hablando mal ni contribuyendo al desprestigio de nuestros centros de investigación», remarcó.