Naufragio

Alivio y tristeza en el recibimiento a los supervivientes del «Argos Georgia»

«Si uno no lo ve, no se lo puede imaginar», ha lamentado el patrón mayor de Ribeira (La Coruña) y al frente de las cofradías gallegas, José Antonio Pérez

Reencuentro de los supervivientes con sus familiares y las autoridades, en el Aeropuerto Internacional de Santiago-Rosalía de Castro, a 28 de julio de 2024, en Santiago de Compostela, A Coruña, Galicia (España). Ha llegado a Santiago el avión fletado por el Ministerio de Defensa para repatriar a los supervivientes españoles del naufragio del pesquero ‘Argos Georgia’, que ocurrió el pasado 22 de julio en aguas de Malvinas. De los seis supervivientes españoles, cuatro son gallegos. La aeronave ...
El avión militar de Defensa ya está en Malvinas para repatriar a las víctimas del naufragio del 'Argos Georgia'César Arxina Europa Press

Sentimientos encontrados en el aeródromo militar de Santiago de Compostela, junto al Aeropuerto Rosalía de Castro, donde los supervivientes gallegos del naufragio del «Argos Georgia» en Malvinas fueron recibidos este domingo de forma emotiva por sus familiares, niños incluidos, y donde se mezcló la alegría del reencuentro con el pesar por los nueve fallecidos en la tragedia (dos españoles), mientras que cuatro miembros de la tripulación siguen desaparecidos (de ellos, dos españoles).

El patrón mayor de Ribeira (La Coruña) y al frente de las cofradías gallegas, José Antonio Pérez, no encuentra las palabras adecuadas para explicar el sufrimiento. Fueron veinte horas en balsas salvavidas, con el agua muy fría, y entre terribles sacudidas por la embestida de las olas. Explica a Efe lo que es trabajar en determinadas condiciones: «Si uno no lo ve, no se lo puede imaginar», se lamenta.

El recibimiento tuvo lugar en la intimidad de las instalaciones del aeródromo, al que no tuvieron acceso los medios de comunicación. Hasta allí se desplazaron también autoridades, como el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco; el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda; el consejero del Mar, Alfonso Villares, o el alcalde de Ribeira, Luis Pérez.

Los cuerpos de los dos españoles fallecidos, César Acevedo, vecino de Vigo y patrón de pesca del barco, y Santiago Leyenda, de Bayona (Pontevedra) y cocinero principal de la embarcación, no han podido ser repatriados debido a los protocolos de las autoridades británicas. Se prevé que sean trasladados a Oxfordshire, en Inglaterra, en los próximos días, donde se les practicará la autopsia para determinar la causa de su muerte.

En Santiago, el avión medicalizado del Ejército del Aire dejó a los cuatro tripulantes gallegos que salvaron la vida en el accidente marítimo, tres de Ribeira (La Coruña) y uno de Pontevedra: José Saborido (capitán), Ramón Hombre, Ramón García y Francisco Gondar. José Manuel Pena, primo político de José Saborido, pidió a la prensa intimidad y respeto, porque las heridas del cuerpo ante lo vivido son leves, no tanto las de la mente.

Dos tripulantes han tenido que ser trasladados al hospital por dolencias leves.

Por su parte, los dos observadores científicos que iban en el buque, Amparo Burguillos, de Socovos (Albacete), y Pere Hernández, de Barcelona, han volado desde Santiago a la Base Aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid). Según ha informado «La Voz de Galicia», ese será también el destino de otros siete supervivientes de distintas nacionalidades, que serán repatriados desde Madrid a sus respectivos países de origen.

El avión militar fletado por el Gobierno de España para la repatriación, un Airbus A330-202, despegó del aeropuerto de Mount Pleasant este sábado a las 22:45 horas (20:40 GMT) para dirigirse a Galicia, donde tomó tierra tras más de 14 horas de vuelo.

En el traslado los supervivientes estuvieron acompañados por personal de la Unidad Médica de Aeroevacuación, ha informado el Ministerio de Defensa.

Con la mejora de las condiciones en el mar, Malvinas ha reanudado el operativo para tratar de dar con los cuatro tripulantes que siguen desaparecidos. Entre los que faltan están el noiés Antonio Barreiro y el ribeirense Juan Antonio García, «Pichón». A este último, un «dorneiro de pro», la Real e Ilustre Cofradía da Dorna, le ha dedicado un comunicado por ser «un gran compañero», y en el que desean que sea encontrado pronto.