Los «congresillos»: prueba de unidad
El proceso de reconstrucción del socialismo que comienza desde hoy bajo la batuta de Sánchez no estará exento de tensiones y deberá dar cabida en el partido a los derrotados si no quiere desaparecer
El proceso de reconstrucción del socialismo que comienza desde hoy bajo la batuta de Sánchez no estará exento de tensiones y deberá dar cabida en el partido a los derrotados si no quiere desaparecer