AirPods
Así es RidePods, el juego para iPhone que convierte tus AirPods en un mando
Gracias al seguimiento de cabeza, los AirPods permiten controlar este juego de iPhone sin tocarlos, ofreciendo una experiencia totalmente diferente
Los AirPods mejoran con cada generación y con cada actualización de firmware gracias a novedades como una mejor cancelación de ruido, nuevas almohadillas —como en el caso de los AirPods Pro 3— o funciones de software como la posibilidad de contestar llamadas con gestos de cabeza o los distintos modos de sonido. Sin embargo, un nuevo juego lanzado en el App Store los aprovecha para algo nunca visto: usarlos como mando para jugar.
Tal y como ha compartido The Verge, RidePods es un nuevo juego disponible en App Store que se puede controlar con los AirPods, utilizándolos como si fueran un mando. Lo más sorprendente es que no hace falta tocarlos en ningún momento: es un juego completamente manos libres.
¿Cómo se ha logrado RidePods?
¿Y cómo se ha conseguido que RidePods funcione con los AirPods sin necesidad de tocar los auriculares? Muy fácil. El desarrollador ha conectado el juego a la función de seguimiento de la cabeza, la cual permite el audio espacial de los AirPods. Un seguimiento que RidePods usa para controlar el juego.
La mecánica de RidePods es tan curiosa como sencilla: mientras juegas, la moto gira a izquierda o derecha según los movimientos de tu cabeza al usar los AirPods. Es una forma diferente e intuitiva de interactuar con el juego desde el iPhone, que sorprende por lo natural que resulta al probarla por primera vez.
Aunque no es algo para jugar durante horas, la experiencia es tan original que merece la pena probarla. RidePods es compatible con los AirPods que cuentan con seguimiento de cabeza, como los AirPods Pro (1, 2 y 3), los AirPods 3, los AirPods 4 y también los AirPods Max.
RidePods aprovecha de forma creativa las funciones de seguimiento de cabeza de los AirPods para ofrecer una experiencia distinta a lo habitual. No pretende ser un juego profundo ni para largas sesiones, pero sí demuestra cómo los desarrolladores pueden experimentar con el hardware de Apple para crear propuestas originales, intuitivas y muy divertidas.