Estreno

«Perni», el homenaje a las heroínas que no salen en la tele

Cosmo estrena dramedia, que ya ha renovado por dos temporadas más

Perni
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Tardas poco en darte cuenta que no sabes qué hacer antes si reír o llorar con «Perni». Acompañarle en su vida es un viaje a lo entrañable y a la crudeza de la vida misma. La protagonista, interpretada por Henriette Steenstrup, debuta como creadora y guionista de esta serie, que se estrenó en Cosmo el pasado miércoles 16 y cuya primera temporada ya está disponible completa en Cosmo On.

Es una producción con mucha chispa y ritmo, que recuerda en algún momento a los tintes de perdedor de «Fleabag» o «After Life», que acaban conquistándote sin remedio. Así es la vida. Un espejo de la complicada vida profesional y personal de una heroína. Una trabajadora social y madre de familia numerosa que se encarga de todo y más allá, de todos. Es fácil atisbar cómo Perni antepone las necesidades de cualquiera a las suyas y cómo su rutina sería tremendamente agotadora para cualquiera. No le falta ni un ápice de optimismo ni aptitud a esta Middleton con una familia peculiar.

En los primeros cinco minutos de la serie, el aparente drama ya se torna en un río de rutinas disparatadas. Un error médico libera al padre de padecer un tumor cerebral por el que decide confesarle que es homosexual a los 71.

Hanna, su hija de 19 años, no es capaz de conseguir un trabajo y gasta todos sus ahorros en planes con sus amigos en lugar de centrarse en su futuro. Sigrid, de 12, cree que su padre, Finn, las dejó porque vivir con Perni era una pesadilla. Y lo piensa porque su madre nunca quiso que sus hijas se dieran cuenta de lo impresentable que podía ser su padre, un escritor que ha huido a Copenhague para vivir una segunda adolescencia. Y sigue en ella por mucho que pasen los años y hasta límites insospechados. ¿En serio? Tal cual.

Tras la muerte de su hermana Anne, Perni se encarga de criar a su sobrino adolescente, Leo. Y la echa tanto de menos que sigue dejándole mensajes en el contestador cada vez que necesita desahogarse. Dramedia. Queda claro. Hay para todos.

Entre tanto, Perni, no renuncia al amor o al menos al sexo o algo que se le parezca y fantasea con un compañero de trabajo, 13 años menor.

«Quería hacer una historia sobre una mujer que es extraordinaria en la vida ordinaria porque creo que muchas personas son así. Y la vida ordinaria es tan interesante y dramática. Quería una heroína cotidiana, del día a día, que trabajara en el servicio a la comunidad. Estas personas realizan estos trabajos no porque estén bien pagados o porque sean glamurosos, sino porque en algún momento pensaron que podían cambiar las cosas y mejorar su comunidad, querían hacer algo bueno», apunta la propia protagonista.

«Perni» ya ha sido renovada por dos temporadas más dada la buena acogida de la primera. La protagonista no deja de ser ese tipo de madre que muchos han tenido, la hija que está ahí para escucharte y la amiga que no falla, pero hay una lectura que va más allá y en la que incide la propia creadora: «Muchos padres hoy en día, y yo me incluyo, sienten que pueden tener éxito en muchas áreas, pero como padres sentimos que hago algo mal todos los días. Creo que la serie realmente nace de ese sentimiento (…) y es un poco triste porque deberíamos ser más comprensivos con nosotros. Te vas a equivocar, te vas a pasar, vas a decir cosas que no deberías, pero tus hijos van a estar bien. Creo que yo necesito escuchar ese consuelo, tanto de los psicólogos como de las series».

Un pequeño homenaje a las batallas del día a día. A las heroínas cotidianas que no suelen salir en la tele.