Prepárense para la desmesura. Para lo inesperado. Y para ver a Dani Martínez haciendo lo que mejor sabe: pasarlo bien liándola en televisión. Telecinco ya promociona su nuevo programa, “La noche del gran show”, un espectáculo de humor en el que el presentador leonés se pone al frente de una adaptación libre, gamberra y a la española del formato británico “The Big Show”. El proyecto, aún sin fecha cerrada, se vende como una de las apuestas estrella de la cadena para renovar su entretenimiento en prime time.

La propuesta parte con un aviso claro: nadie está a salvo. Ni el público, ni los colaboradores, ni los invitados. “Todo el mundo puede verse envuelto en alguna de las secciones”, ha explicado el propio Martínez, que se reencuentra así con el gran plató después de su paso por “Got Talent” y del final de “Martínez y Hermanos” en Cuatro. Pero aquí no hay jurado ni sofá con mantita. Esto es más bien una trampa amable en forma de plató: lo que empieza como un espectáculo televisivo puede convertirse en una encerrona emocional, musical o directamente cómica para cualquiera que esté cerca.

A medio camino entre el clásico programa de variedades, la cámara oculta y el caos organizado, “La noche del gran show” buscará la complicidad del público en directo, pero también el factor sorpresa que tanto gusta en redes. Y para eso, claro, hace falta traer nombres conocidos. La cadena ya ha desvelado a algunos de los famosos que se prestarán a este juego de improvisación con guion y guion sin improvisar: Chenoa, Paula Echevarría y Jaime Lorente son los primeros confirmados, aunque la lista se irá engrosando a medida que se acerque el estreno.

La mecánica del formato madre británico ya dejaba claro que aquí hay más de truco que de trato. Desde secciones musicales que convierten a espectadores anónimos en cantantes de estadio (o al menos lo intentan), hasta cámaras ocultas, confesiones grabadas por familiares sin permiso y números sorpresa orquestados con la ayuda de cómplices dentro del plató. Dani será maestro de ceremonias, sí, pero también cómplice principal de muchas de estas trastadas con final feliz.

En un panorama de televisión generalista en el que el humor se reparte con cuentagotas, Telecinco apuesta fuerte por este tipo de espectáculo híbrido: con narrativa en directo, secciones pregrabadas y mucho juego con las emociones. “Cualquier persona puede convertirse en la estrella de este escenario”, recalca la cadena en la promo. Aunque también cabe decir que cualquier persona puede acabar cantando, llorando, bailando o siendo víctima de un sketch que mezcla ternura, música y payasadas en dosis variables.

“La noche del gran show” no llegará sola. Compartirá protagonismo en la nueva parrilla con otro título de corte similar: "La noche de los récords" presentado por Jesús Vázquez, y que también apunta al entretenimiento puro y duro. Entre ambos, Mediaset parece querer recuperar ese tono más familiar y participativo con el que cosechó algunos de sus mayores éxitos.

Queda por ver si el público está en modo receptivo o si necesita un calentamiento previo. Pero lo que es seguro es que Dani Martínez no llega para mirar desde la barrera. Su estilo, siempre rápido, siempre reactivo, encaja como un guante en un espacio donde la improvisación es reina y la risa, moneda oficial. Que su vuelta a Telecinco llegue en forma de juego colectivo, en el que el plató se convierte en una pista de circo moderno, no debería sorprender a nadie. Y si sorprende, mejor aún. Porque lo dicho: aquí nadie sabe lo que puede pasar.