El magacín matinal 'Vamos a ver', conducido por Joaquín Prat y Patricia Pardo y emitido de 10:30 a 15:00 durante los meses de verano, ha arrancado hoy con un impactante y trágico suceso: el caso de una joven canaria de 17 años que fue quemada viva tras ser rociada con combustible por Abarrafia H., un inmigrante alojado en el centro ‘Canarias 50’. Este hombre, pese a encontrarse en situación irregular y tener orden de expulsión, tenía libertad para entrar y salir del centro con normalidad. Joaquín Prat, maestro de ceremonias de Mediaset, no ha dudado en denunciar públicamente la doble quiebra del sistema que este episodio refleja. Por un lado, un inmigrante con antecedentes que logra fugarse sin control; por otro, una menor de un hogar desestructurado, bajo tutela del Gobierno de Canarias, que se había fugado del centro de menores donde residía, sin que ninguna institución lograra localizarla antes del crimen. Una situación que pone de manifiesto las graves deficiencias del sistema de protección tanto de menores como de control migratorio.

El magacín de Telecinco ha emitido el testimonio de Carmelo, el vecino que dio la voz de alarma tras el incendio que afectó a una menor, supuestamente rociada con gasolina en una vivienda de Canarias. Según explicó, la tragedia se desencadenó en plena madrugada: “A las cuatro de la mañana me despertó el humo, pensé que era mi casa la que se estaba quemando”, relató, todavía afectado. Al asomarse desde su azotea, se dio cuenta de que el fuego provenía de una vivienda cercana: “Vi un humo negro, irrespirable, que me hizo daño hasta en la garganta. Corrí de un lado a otro hasta que vi las llamaradas y llamé a los bomberos”. Carmelo destacó el miedo vivido junto a su mujer, temiendo que las llamas alcanzaran un taller cercano donde podría haber gasolina. “Estábamos superasustados. Nunca imaginé lo que realmente había pasado. Fue algo impensable”, confesó, señalando la conmoción que provocó el suceso en todo el barrio.