La costa Amalfitana (en italiano, Costa d’Amalfi o Costiera Amalfitana) toma su nombre de su municipio más importante, Amalfi, capital histórica de la república amalfitana, una de las repúblicas marineras italianas que dominaron el Mediterráneo en torno al siglo XII.

Fue a principios del siglo XX cuando empezaron a construirse hoteles de lujo y comenzaron a llegar las personalidades más adineradas y exclusivas de Europa y artistas y personalidades como Wagner, Greta Garbo, Picasso, Klee, Pirandello, Steinbech, Zefirelli o Warhol.

En la actualidad, es uno de los destinos más repetidos en redes sociales, lugar de vacaciones de famosos e influencers, que posan en sus maravillosas playas como escenario.

Los principales pueblos de la Costa Amalfitana:

1. Vietri sul Mare: puerta de entrada de la Divina Costa y cuna de los azulejos como queda claro en la cúpula de la iglesia de San Giovanni Battista con vidrios de Maiolica.

En cuanto a sus playas, constan de zonas libres y zonas privadas, algo que se repite en las playas de toda la Costa Amalfitana. Tres playas, Playa Marina di Vietri, Playa La Bahia y Playa La Crestarella.

Cetara: el nombre de este pueblo deriva de la palabra latina «cetaria» que en español significa atún o «cetari», que significa pescaderías de grandes peces. Un auténtico pueblo de pescadores que ha conservado su encanto hasta el día de hoy y se ha hecho unes famoso por sus platos a base de pescado.

Maiori: los centros balnearios más frecuentados por sus playas de arena fina, también disponen de bellas iglesias- respectivamente San Pietro y Santa Maria a Mare, con sugerentes cúpulas revestidas de mayólicas.

Minori: es toda una sorpresa que a veces es ignorada por la fama de otras ciudades como Positano o Amalfi. Valiosa por la belleza de su naturaleza y por la villa Romana del siglo I, muy bien conservada y decorada con estucos, mosaicos y frescos.

Junto a Maiori, Minori es uno de los pueblos que más terreno de playa ofrece. Se puede optar por pagar por una sombrilla y dos sillas (unos 20€/día) en una zona privada, o usar las zonas de playa «libre» por lo general bastante pequeñas.

Ravello: desde el 1997 forma parte del Patrimonio de la humanidad por la Unesco. Elegante y refinado, es uno de los pocos pueblos de la Costa Amalfitana que no posee playas.

Fundada en el V siglo, se cree que fue refugio de algunas familias de alta sociedad de Amalfi en un momento de conflicto interno entre las familias más poderosas.

Sus principales monumentos son su Catedral y las espléndidas Villa Cimbrone y Villa Rufolo, sede del famoso Festival dedicado a la música, el arte y la cultura.

Lo mejor de Ravello son sus panorámicas , ya que desde lo alto permite admirar toda la Costa.

Atrani: uno de los pueblos amalfitanos más pintorescos y sugerentes, con el blanco de las casas interrumpido por los colores brillantes de los jardines. El pueblo se ha desarrollado alrededor de muchas iglesias que siguen siendo os lugares más bellos para visitar, tanto por las obras artísticas como por los lugares donde se construyeron.

Una curiosidad: es el pueblo más pequeño de Italia por extensión, un antiguo pueblo construido en tan solo 0.9 kilómetros cuadrados.

Amalfi: ciudad que da nombre a la Costa Amalfitana y cuya catedral, en italiano Duomo di Sant’Andrea, con su espectacular fachada de mosaico. es el símbolo por excelencia de la ciudad de Amalfi y de toda la Costa.

La playa de Amalfi es bastante pequeña por lo que la mejor opción para conseguir un hueco es alquilar una sombrilla con sillas. Para conseguir un hueco gratis es mejor caminar un poco y alejarse del centro.

Desde el Puerto de Amalfi salen barcos privados y públicos para hacer recorridos por la Costa Amalfitana.

Conca dei Marini: declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Aquí se encuentra la Gruta Emeralda, en italiano «Grotta dello Smeraldo» descubierta en el 1932 por el pescador Luigi Buonocore. Mide unos 45 x 30 metros y tiene unos 25 metros de altura. Toma su nombre de la tonalidad esmeralda que caracteriza el agua en el interior de la cueva, debida a la luz solar filtrada a través de una fisura submarina que la conecta con el mar abierto.

Furore: las pequeñas casas construidas en este pueblo se conocen como “monazeni”, denominación que probablemente proviene del griego y que significa “vida solitaria”.

Muchos VIP han elegido este lugar de difícil acceso que es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y miembro de la Asociación de los pueblos más bellos de Italia.

Praiano: uno de los pueblos más bonitos de la zona, merece la pena descubrirlo recorriendo sus calles y sus monumentos, entre los que se encuentran la Iglesia de San Luca Evangelista, que custodia espléndidos lienzos del siglo XVI, y la Iglesia de San Gennaro. Praiano es famoso por sus atardeceres, que se dicen los más románticos de toda la Costa Amalfitana.

Por el camino costero «Sentiero sulla Scogliera», se puede llegar hasta la «Torre a mare», una torre militar de la época medieval. Desde allí se puede llegar a «L’Africana» una exclusiva discoteca en la roca, a la que también se puede llegar desde Positano en barco.

Las playas de Cala della Gavitella y de Marina di Praia son las más famosas de Praiano.

Positano: es el pueblo más turístico de la Costa Amalfitana y uno de los más famosos a nivel internacional. Una joya encastrada entre acantilados rocosos. Los colores de las casas se mezclan con los de las boutiques, los de los laboratorios artesanales y y con los de los refinados bares que animan la vida en las estrechas callejuelas de este pueblo al que se conoce como el pueblo de las escaleras, porque es imposible visitarlo sin subir y bajar por sus innumerables escaleras. La iglesia más importante de Positano es de del 1200 y está dedicada a su patrona, Santa Maria Assunta.