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Para mí, la obra maestra de ciencia ficción que es eterna: una joya que te hará cuestionar toda la realidad

Estrenada hace casi 30 años, este clásico de ciencia ficción visionario anticipó la obsesión por la realidad como entretenimiento

Truman Burbank vive sin saber que su vida entera es un espectáculo televisivo seguido por millones de personas
Truman Burbank vive sin saber que su vida entera es un espectáculo televisivo seguido por millones de personasDifoosion

Resulta impactante pensar cómo una película estrenada hace casi 30 años pudo adelantarse a prácticamente todo lo que rodea a la sociedad del presente. Un filme que, con el paso del tiempo, ha ido cobrando mayor importancia por convertirse en el reflejo más incómodo sobre nuestra relación con la verdad y el espectáculo. Bajo la apariencia de una comedia, El show de Truman sorprende por construir el escenario más inquietante.

Dirigida por Peter Weir, la película tiene como protagonista a un hombre que vive sin saberlo en el mayor programa de televisión de la historia. Por lo tanto, es observado por millones de espectadores que consumen cada minuto de su vida como su entretenimiento. Interpretado por un Jim Carrey en un registro diferente, Truman Burbank se encuentra un mundo tan perfecto que, en ciertos momentos, resulta extrañamente sospechoso.

Truman Burbank y su vida bajo vigilancia

En realidad, la ciudad costera en la que vive, Sehaven, es un gigantesco set. Una falsa ilusión que él toma como si fuera verdadera. Cada persona que lo rodea es parte de un reparto que sigue el guion diseñado por el creador del programa. Y es que esa normalidad impostada es uno de los elementos más poderosos de la película. Lo que Truman empieza a percibir como fallos en su rutina es la grieta a través de la cual se filtra la duda y, con ella, la búsqueda de libertad.

Más allá de que la película destaca por tener un argumento visionario, el largometraje es revolucionario por la manera de anticipar un fenómeno que en el presente resulta cotidiano. Antes de la era de las redes sociales, dominada por la instantenidad y el contenido rápido, la cinta ya planteaba una sociedad que consume la realidad ajena como si fuera un producto.

En consecuencia, esa barrera que divide lo auténtico y lo fabricado se vuelve difusa. Su relevancia, incluso a día de hoy, se sostiene gracias a la claridad de su planteamiento: una sociedad observada y observadora a la vez. Justa ante esa disyuntiva, la película formula una pregunta que sigue sin haber perdido un ápice de fuerza. ¿Qué significa realmente la libertad?

A lo largo de la trama, Truman avanza desde la máxima sospecha hasta la inevitable rebelión. Ese recorrido, la evolución que vive como personaje, es la prueba que demuestra que necesitamos ser dueños de nuestra propia historia. Si tuviese que elegir entre todas, la decisión de abrir la puerta y adentrarte en lo desconocido es la lección más valiosa que te da. Para mí, un clásico imprescindible que todo el mundo debería ver al menos una vez. Puedes encontrarla en el catálogo de Prime Video.