Moncloa solivianta a Junta y empresarios al «intervenir» las cuentas andaluzas

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, hablará esta mañana con su homólogo en Andalucía Juanma Moreno dentro de la ronda de contactos con los presidentes autonómicos para negociar la investidura. Pero Moreno tiene claro que hablarán de otro tema: la «intervención» de las cuentas andaluzas, al impedir a la comunidad salir a los mercados, y la exigencia de un «plan de ajuste» por la desviación -de una décima- de los objetivos de estabilidad en el Presupuesto de 2018, gestionado íntegramente por un Gobierno socialista en el que además hasta julio de ese año la responsable de Hacienda era la actual ministra María Jesús Montero.

El presidente andaluz exigirá a Sánchez que rectifique en lo que considera «un atropello que no vamos a consentir». Critica tanto el fondo como las formas, una carta del secretario general de Hacienda fechada el 5 de diciembre que se hizo pública este domingo. Y lo cierto es que, tal como otras veces pasó con los Ejecutivos andaluces del PSOE, en el discurso del agravio a Andalucía desde Madrid ni la Junta de PP y Cs ni los populares están solos. Nada más trascender la misiva, la idea de que Moncloa actúa por «venganza» al territorio cuyo poder perdió tras 37 años hace apenas once meses estuvo en boca de dirigentes de Vox o líderes empresariales como los de la CEA o ATA.

Desde el Ministerio de Hacienda se afanaron en explicar que no hay ninguna intervención sobre las cuentas sino que lo único que se pide es un plan económico-financiero en el que indique cómo va a corregir ese desvío pero «las comunidades tienen libertad y autonomía» para decidir cómo. En la práctica, sostiene la Junta, se impide la rebaja fiscal que PP y Cs contemplan en los recién aprobados presupuestos de 2020 y aunque lanzan un mensaje de tranquilidad, deslizan los posibles recortes en empleo público y servicios sociales. Para el PSOE-A, es una «cortina de humo» con la que buscan «enmascarar» los «recortes» que el Ejecutivo andaluz planea. Pero el consejero de Hacienda, Juan Bravo, confía en que haya «margen de negociación». Y el presidente Moreno también tiene claro que si no es así, Ferraz le está dando un arma política de primera magnitud para echar en cara a la oposición socialista que es el Gobierno central de su propio partido el que torpedea a Andalucía. De ahí que hablen de «torpeza» de Sánchez y Montero.

El propio presidente de la patronal andaluza, Javier González de Lara, consideró «inoportuna» la carta de Hacienda, por el «daño reputacional» a Andalucía que la semana pasada se convirtió en la primera comunidad en aprobar sus cuentas para 2020 transmitiendo una imagen de estabilidad y confianza. goza de una imagen de estabilidad y confianza al ser la primera comunidad en aprobar sus cuentas de 2020. Unas cuentas, además, que preven déficit 0 y «cumplidoras» como las de 2019. Más expresivo fue en Twitter el presidente de la Federación de autónomos ATA, Lorenzo Amor, al hablar de «despropósito» por cuanto «quien causó el desvío del déficit y la pésima gestión económica, castiga a los andaluces con una nueva medida desproporcionada».

Más allá del rifirrafe político, la consecuencia práctica es que al incumplir los objetivos de estabilidad, deuda pública y regla del gasto en el ejercicio 2018, Andalucía «hoy por hoy» no cumple los criterios que la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos estableció en julio de 2018 para permitir a las comunidades colocar deuda en los mercados para financiarse. La Junta tenía previsto captar 1.930 millones por esta vía en 2020.

De los dos mecanismos de financiación autonómica previstos, el Fondo de Facilidad Financiera y el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), ya no puede acceder al primero sino solo al segundo, que la Junta rechaza por considerar que las condiciones de los préstamos son peores mientras que desde el ministerio aseguran que «las condiciones financieras son las mismas y el tipo de interés actualmente es del 0% para nuevos préstamos en ambos». También desde el PSOE andaluz, el portavoz parlamentario Rodrigo Sánchez Haro, criticó que «ahora el Gobierno de PP y Cs cuestionan el FLA que inventó el ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy» cuando «ni una sola vez se quejó Juanma Moreno del FLA estando en la oposición; lo aplaudía».

En Cs y Vox llegaron a hablar de «un 155» a Andalucía mientras en Adelante criticaron que la Junta no informara de la carta durante el debate del Presupuesto de 2020 la semana pasada. Teresa Rodríguez denunció el «juego de trileros» de unos y otros para justificar recortes.