La comisión para el impulso del Estatuto no se reúne desde 2011

El PSOE andaluz cree haber encontrado una postura propia en el debate territorial que se ha avivado por las negociaciones de Pedro Sánchez con los independentistas vascos y catalanes para una posible investidura una vez que, como es previsible, fracase el intento de Alberto Núñez Feijóo. Así, el Grupo Socialista ha registrado en el Parlamento andaluz una proposición no de ley (PNL) con la que propone al Pleno de la Cámara la creación de una ponencia en el seno de la Comisión de Desarrollo Estatutario que tenga como objetivo «la elaboración de un informe de evaluación tanto del despliegue de las competencias y el ejercicio de las mismas como de los derechos contemplados» en el Estatuto de Autonomía, «así como posibles propuestas y líneas de desarrollo para, en el marco estatutario, profundizar al máximo en la capacidad de autogobierno de la comunidad autónoma».

La comisión de Desarrollo Estatutario –que en esta legislatura preside el socialista Mario Jiménez– está considerada como permanente dentro del Reglamento del Parlamento de Andalucía y se constituye todas las legislaturas en igualdad de condiciones que las que se corresponden con cada una de las consejerías en las que se divide el Gobierno de turno. También se incluyen en este grupo la comisión de Reglamento; la del Estatuto de los Diputados; de Nombramientos, Relaciones con el Defensor del Pueblo Andaluz y Peticiones; la de Control de la Agencia Pública Empresarial de la Radio y Televisión de Andalucía y de sus Sociedades Filiales; de Seguimiento y Control de la Financiación de los Partidos Políticos con representación en el Parlamento de Andalucía; y la de Asuntos Europeos.

En concreto, la relativa al Estatuto, se creó por acuerdo de la Mesa del Parlamento a instancia de los Grupos Socialista, Popular de Andalucía, Izquierda Unida Los Verdes-Convocatoria por Andalucía y Andalucista el 12 de mayo de 2004.

La fecha elegida no fue casual. Se hizo en pleno debate sobre el nuevo Estatuto de Andalucía, aunque sus funciones iban más allá. De hecho, inicialmente se justificó en «el estudio y propuestas de posibles reformas del Estatuto de Autonomía para Andalucía, así como la valoración, seguimiento y control del proceso de transferencias a la Comunidad Autónoma de Andalucía, de sus sistemas de financiación y estudio de propuestas de índole legislativa sobre reformas de la legislación electoral andaluza».

Tras su creación, desarrolló una gran actividad hasta la aprobación del dictamen final del Estatuto de Autonomía el 2 de febrero de 2006. Desde entonces, esta comisión prácticamente se ha limitado a constituirse en cada legislatura, tal y como es preceptivo, pero no ha tenido actividad.

En su momento, la iniciativa sirvió para «contrarrestar» la petición de más autonomía de Cataluña a con un nuevo Estatuto y «evitar» que se formalizara un desarrollo autonómico de dos velocidades.

El PSOE andaluz recupera ahora esa estrategia una vez que en el debate nacional se ha instalado de nuevo que los posibles acuerdos con los nacionalistas de un Gobierno de Pedro Sánchez y Sumar consagren una España asimétrica, con comunidades autónomas con competencias diferenciadas.

La prueba es que la comisión de Desarrollo Estatutario ha sido irrelevante desde 2007. Una consulta al diario de sesiones muestra que solo se reunió –al margen de las convocatorias para constituirse y nombrar a nuevos diputados miembros de la misma– el 19 de junio de 2008 con la comparecencia el entonces vicepresidente primero y consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, para valorar el proceso de transferencias a la Comunidad Autónoma, así como las prioridades de las mismas en el marco del desarrollo del Estatuto de Autonomía; y el 24 de marzo de 2011 parra que la consejera de la Presidencia, Mar Moreno, informara sobre la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el artículo 51 del Estatuto de Autonomía para Andalucía en relación a las competencias del río Guadalquivir.

La propuesta del PSOE andaluz tiene también un doble objetivo. Por un lado, amplificar la presencia de Vox, partido que muestra su rechazo a la España de las autonomías y a profundizar en el autogobierno de las comunidades autónomas; y, por otro lado, poner el acento en la mejora del autogobierno existente, es decir, en la gestión actual de las competencias propias y fortalecer así su labor de oposición al Ejecutivo de Juanma Moreno.

De momento, el Gobierno andaluz calificó ayer a través de su portavoz, Ramón Fernández-Pacheco, de «show» y de «cortina de humo» la propuesta socialista y exigió a Espadas que rechace la posible «amnistía» a los implicados en el «procés» catalán.