Mesa Redonda

La educación a debate: retos en la formación del alumnado

Los expertos reclaman más comunicación entre las administraciones y los centros educativos para abordar los problemas de la enseñanza andaluza

De izquierda a derecha, Luis Rey, Agustín Aycart, el periodista Fran Cárceles, Virginia Simón y Carmen Mellado
De izquierda a derecha, Luis Rey, Agustín Aycart, el periodista Fran Cárceles, Virginia Simón y Carmen MelladoKiko HurtadoKiko Hurtado

La internacionalización, el bilingüismo, los diferentes currículums educativos, la apuesta por una formación práctica o las nuevas realidades a las que se enfrentarán los alumnos son cuestiones que, por sus consecuencias en el futuro de los estudiantes, deben resolverse de forma eficiente entre las instituciones públicas y privadas. En este proceso de transformación, todos los agentes implicados deben caminar de la mano con un solo objetivo: formar alumnos excelentes.

Sobre esto se habló en la mesa redonda “Innovación en la educación: retos para la formación del alumnado” organizada por LA RAZÓN y celebrada en el hotel Abba Sevilla. En esta ocasión participaron Agustín Aycart, director de CBS, The British School of Seville; Luis Rey, director del Colegio Internacional de Sevilla – San Francisco de Paula; Virginia Simón, directora de Ilerna Sevilla; y Carmen Mellado, jefa de Servicio de Programas Educativos Internacionales de la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de la Junta de Andalucía.

Ilerna es un centro de Formación Profesional de modalidad presencial y online que aterrizó Sevilla en 2020. Forma a cerca de 600 alumnos al año a través de una metodología innovadora muy enfocada al trabajo real que desempeñarán los estudiantes. El 94% de los alumnos que se forman en el centro se incorporan al mercado laboral una vez acabado los estudios. La directora del centro explicó cómo nació el Grupo y su transición hacía la educación a distancia en todas las provincias, un hecho que calificó de “pionero” en España. “Ahora tenemos más empresas que alumnos”, afirmó, para explicar que las titulaciones de grado Medio y Superior dan acceso a “muchos trabajos que cuentan con muy buenas condiciones”.

Respecto la respuesta de la FP a las nuevas ofertas de trabajo que se quedan sin vacantes porque no hay profesionales cualificados, Simón explicó que “nos falta pedagogía y conocimiento de la cantidad de caminos que se pueden seguir” y defendió los ciclos de FP como una forma de comenzar una carrera exitosa. Por su parte, Aycart puso de ejemplo la metodología que –en general– se sigue en los grados universitarios de Europa para compararla con el caso español: “son más prácticos y enfocados a la inserción laboral de los estudiantes”, sentenció. Ambos coincidieron en la idea de que la formación práctica es fundamental para la “proyección profesional” de los alumnos y que la FP es, incluso, el complemento perfecto para otros grados universitarios. “Cuando te metes de lleno en la parte relacionada con lo que quieres hacer es cuando te entran ganas de profundizar en lo que sea”, aseguró Aycart.

El director del Colegio Internacional de Sevilla – San Francisco de Paula explicó que todos los alumnos del centro optan por bachillerato para acceder a un grado universitario. “La formación profesional tiene una agilidad que le permite responder a las necesidades actuales que la universidad, por todos sus procedimientos, no tiene”, opinó. Asimismo, matizó que la FP “ahora tiene mucho más sentido” por los nuevos enfoques que la hacen atractiva. Rey puso el ejemplo de Alemania, país en el que “casi el 50% –de los jóvenes–elige la formación profesional”. Todos coincidieron en que acceder al mercado laboral "a través de otros circuitos es totalmente posible porque en Europa es una realidad”.

Asimismo, los ponentes estuvieron de acuerdo en que debe haber una alianza entre administraciones, centros de FP, universidades y empresas para poner fin a dos situaciones: la precariedad de los alumnos en prácticas y la poca formación orientada al mundo laboral. “Tenemos que trabajar más, no solo desde los centros, en que se generen oportunidades”, señaló Simón en referencia al papel de las administraciones públicas.

La internacionalización en educación no debe entenderse solo como la enseñanza de idiomas, sino como la transformación de las metodologías educativas tradicionales en otras más innovadoras, prácticas y que ayuden al alumno a aprender a través de la investigación y sus recursos. En este contexto, Mellado explicó que desde la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional “se está potenciando todo lo que tiene que ver con la internacionalización de los alumnos y los centros educativos, entendiendo que es una oportunidad para las FP y el resto de las enseñanzas”. Durante el coloquio, Mellado recordó que desde la Junta de Andalucía se han llevado a cabo visitas a centros privados como el Colegio San Francisco de Paula en Sevilla para replicar el sistema de Bachillerato Internacional en los centros públicos. El sistema educativo andaluz cuenta este curso con un total de 1.250 centros docentes públicos que imparten enseñanzas bilingües . La red pública de Bachillerato Internacional se ha ampliado a diez centros públicos con la incorporación del Instituto Fernando de Herrera de Sevilla y el Salvador Rueda de Málaga. El resto de centros están repartidos por toda la comunidad. “Parece que el Bachillerato Internacional es una oportunidad para el cambio metodológico”, aseguró. Además, la jefa de Servicio de Programas Educativos Internacionales adelantó que desde la Junta están “trabajando muy intensamente en un diagnóstico de los programas que ya teníamos y estudiando qué propuestas de mejora podemos aportar”.

La coordinación entre administraciones públicas y privadas se erige como un tema fundamental a la hora de llegar a acuerdos que garanticen la calidad de la enseñanza. Simón criticó algunas carencias que encuentra en la legislación como la orden que regula las prácticas en empresas, que, según señaló, es de 2011. No obstante, todos los ponentes reconocieron que se están llevando a cabo nuevos cambios en beneficio de la comunidad educativa.

Por otro lado, Aycart quiso recordar que en CBS, The British School of Seville se lleva a cabo el Bachillerato Británico, que lo calificó como “el más internacional de todos” porque permite, a través de la obtención de varios títulos de A-Levels, acceder a cualquier universidad del mundo. Los A-Levels son titulaciones estructuradas en asignaturas que normalmente se cursan durante los dos últimos años de secundaria, por lo que los estudiantes eligen desde bachillerato en qué especializarse. El director del Colegio Internacional de Sevilla - San Francisco de Paula discrepó con Aycart y apostó por el Bachillerato Internacional, que “incluye elementos adicionales como la investigación o la interrelación de las materias”, un hecho que, a su juicio, hace que los alumnos estén mejor preparados. No obstante, ambos sistemas cuentan con un gran prestigio internacional.

Otros de los temas que se abordó en la mesa redonda fue el bilingüismo y la enseñanza de terceros idiomas. ¿Es posible que un alumno aprenda varios idiomas y alcance un nivel bilingüe en todas? Todos coincidieron en la idea de que los niños conseguirán este objetivo si desde la infancia acuden a un colegio bilingüe con profesores nativos. Aycart, además, apuntó que para aprender un tercer idioma de la misma forma necesitan “traerlo de casa”, es decir, que alguien en casa les hable en otra lengua desde la infancia. Por su parte, Rey opinó que “cualquier niño puede aprender varios idiomas a la vez siempre y cuando los profesores sean nativos y sean diferentes personas quienes se dirijan a ellos en otros idiomas”.

En última parte del coloquio se trataron los contenidos que los alumnos deben aprender en clase y los mejores métodos educativos. Para Rey “es fundamental que les despertemos el ansia de seguir conociendo y seguir enriqueciéndose mental y culturalmente porque eso es lo que les va a permitir mantenerse actualizados a lo largo de la vida”, y no un marco teórico que puede cambiar con los años. Simón apostó por “abrir la mente a los alumnos desde edades muy tempranas” y Mellado, en la línea de los demás, aseguró que los alumnos “tienen que tener un por qué” para estudiar, un asunto que consideró que se puede solventar con un “aprendizaje práctico en las aulas”. Por su parte, Aycart aseguró que “cuando un niño está disfrutando es que está aprendiendo”.

Los ponentes discutieron sobre la importancia de que el profesorado esté coordinado y considere a cada alumno único. La directora de Ilerna Sevilla aseguró que desde su centro se incentiva a los profesores para que “los alumnos consigan hacer cosas que jamás pensaron que iban a hacer”. Por su parte, Rey afirmó que “la colaboración de los profesores en el cuidado de la persona en la salvaguarda, orientación y guía son absolutamente fundamentales”, un asunto para el que hay que “estar perfectamente coordinados”, matizó. Aycart aprovechó la ocasión para explicar que en el centro que dirige cada alumno es único y que la comunicación con los padres y profesores es indispensable para el desarrollo de los jóvenes.

Por último, todos volvieron a proponer ideas para hacer de la educación andaluza un sistema de calidad e hicieron hincapié en la rigidez de las administraciones públicas con algunos asuntos, aunque reconocieron que en los últimos años se está avanzando a un ritmo mucho más rápido.