Francisco Salado: «Los alcaldes socialistas han de dejar a un lado la ideología»

La sequía y la movilidad son dos cuestiones que preocupan a los alcaldes malagueños. El presidente de la Diputación Provincial, Francisco Salado, alza la voz y reclama la implicación de todas las Administraciones para afrontar estos desafíos.

¿Cuáles son los grandes desafíos que tiene la provincia de Málaga en la recta final de este 2023 y ante la inminente llegada del otoño?

Sin duda alguna, la sequía es la gran amenaza que tiene a día de hoy la provincia, y ha de ser una de las grandes prioridades a nivel político e institucional. Tanto desde la Diputación como desde la Administración autonómica, hay un claro compromiso por acometer actuaciones importantes para hacer frente a la falta de agua, pero nos falta aún el compromiso del Gobierno de España por arrimar el hombro y acometer las actuaciones que son de su competencia.

Recientemente se ha creado el Foro Metropolitano que ha puesto sobre la mesa las reivindicaciones de muchos munícipes dando voz a las necesidades de sus conciudadanos. Un primer encuentro en el que participaron 17 regidores del PP, cinco del PSOE, dos de Izquierda Unida y un independiente. ¿Cuándo y por qué surge esta iniciativa?

Hay muchos alcaldes en la provincia de Málaga que nos han trasladado su gran preocupación no sólo por la mencionada sequía, sino por cuestiones como la movilidad, entre otras. Gracias a que tenemos en la capital a un gran referente del municipalismo, como es Francisco de la Torre, hemos visto necesario crear un foro que actúe de marea municipalista para poner sobre la mesa y reivindicar las cuestiones que atañen a la provincia, y que nos han de implicar a todos, con independencia del color político.

¿Ha echado de menos un compromiso firme por parte de alguno de los asistentes?

Cabe recordar que el propio coordinador territorial del PSOE de Málaga y alcalde de Mijas, Josele González, cuestionó tras el encuentro la falta de disposición de la Junta a la que reprochó inacción en materia de sanidad o educación, y protagonizó una salida de tono intentando hacer creer que la reunión se había planteado para atacar al Gobierno. Nada más lejos de la realidad. Nos hemos limitado a exigir a cada Administración que acometa las cuestiones que son de su competencia en cada ámbito. Y que se prioricen las auténticas necesidades de la provincia.

¿Qué le pide, en definitiva, a todos los alcaldes del área metropolitana a partir de esta primera toma de contacto?

Compromiso sin fisuras para establecer plazos y financiación. Hemos de ir todos a una. Conmino a los alcaldes socialistas a que se quiten la toga del partido político al que representan, que dejen a un lado la ideología.

¿En qué otros ámbitos hace falta más implicación por parte de todas las Administraciones?

Sin duda alguna, en materia de infraestructuras. La movilidad está convirtiéndose en uno de los grandes hándicaps de muchos municipios, especialmente en la Costa del Sol Occidental donde es más necesario que nunca avanzar en el tren litoral, más allá de estudios e informes como se ha venido haciendo en las últimas décadas. Es una infraestructura más que necesaria para poder evitar el colapso de una provincia que no sólo ha aumentado de manera exponencial su población en los últimos años sino que prevé incrementar en unos 300.000 habitantes de aquí a los próximos quince años.

Estamos todavía en época de peligro alto de incendios forestales, iniciada el pasado mes de mayo y que concluirá a mediados del mes de octubre. En esta campaña afortunadamente no ha habido que lamentar grandes incendios, como ocurriera el pasado verano en Pujerra o la Sierra de Mijas, o con el devastador fuego del verano precedente en Sierra Bermeja…

No hay que bajar la guardia. Hay que estar siempre prevenido, los 365 días del año, máxime cuando el campo, el monte, están muy secos y en cualquier momento puede producirse un incendio. Estamos en alerta máxima, no hay que olvidar que las temperaturas han sido este verano extremadamente altas y siguen siendo en esta época del año muy altas.

¿Qué premisas hemos de tener presente aunque parezca que el verano, y por tanto el riesgo, ha terminado?

Hay que recordar que siguen vigente a día de hoy todas las prohibiciones planteadas en materia de prevención, como la quema de restos vegetales y el uso de fuego para la preparación de alimentos. Hay que tenerlas muy presentes, al igual que todo tipo de recomendaciones.

Lo que sí ha concluido es el periodo estival por excelencia a nivel turístico. ¿Satisfecho con los indicadores que ha cosechado el sector pese a la falta de rentabilidad que sigue siendo un caballo de batalla?

Ha sido un verano extraordinario en el que se han recuperado los indicadores de 2019, que ya fue un año histórico. Nuestra apuesta no pasa sólo por aumentar cuantitativa sino cualitativamente el perfil del turista que nos visita.

En unos días arranca la Solheim Cup en la Finca Cortesín (Casares), una competición internacional de golf femenino que pondrá en el foco el potencial de la provincia, contribuyendo a atajar la estacionalidad del sector.

Hablamos del torneo de golf femenino más importante del calendario internacional, que reúne y enfrenta a los equipos de Europa y Estados Unidos cada dos años, en esta ocasión en la Costa del Sol. Hasta la fecha se han vendido más de 90.000 entradas, una cifra más que relevante, y se prevé un impacto económico de 500 millones de euros. Es, por cierto, un claro ejemplo de falta de interés por parte del Gobierno Central, con un nulo apoyo a esta competición frente su decisión respecto de la Ryder Cup de Cataluña 2031 sobre la que se ha hecho una clara y decidida apuesta, habiendo comprometido al menos 50 millones de euros.