Al rico turista británico en Andalucía

El mercado británico atesora una de las economías más robustas del mundo, pese a la pandemia del coronavirus y su salida de la UE. No en vano es una de las diez economías más importante del mundo. El PIB per cápita en 2020 fue de 36.156 euros, un indicador que refleja que su población tiene buen nivel de vida, traducido en variables como que ocupa el tercer lugar del mundo en términos de salidas de internacionales, superado tan sólo por China y Hong Kong.

Con una población de 67 millones de personas, en 2019, antes de la pandemia, se constató un total de 93,09 millones de salidas al extranjero, con un gasto cercano a las 62.325 millones de libras. En ese contexto, Andalucía es la segunda comunidad autónoma que más turistas británicos recibió en 2021, tan sólo superada por Baleares y es Málaga la provincia que acapara el mayor porcentaje de esos viajeros, según datos de la empresa pública Turismo y Planificación de la Costa del Sol, dependiente de la Diputación.

Durante 2019, cuando el aeropuerto de la Costa del Sol estaba conectado a un total de 18 capitales británicas, se superaron los 6,9 millones de pernoctaciones de viajeros, alojados en hoteles y apartamentos, cifras que se esperan recuperar durante el año en curso, tras el impasse de la pandemia.

Ya en 2021 la cifra de conexiones se redujo a 14, si bien durante el año en curso se están recuperando paulatinamente e incluso se espera superar los datos precedentes.

En la provincia, malagueña el Reino Unido tradicionalmente ha sido el principal emisor tanto de turistas como de inversores al destino Costa del Sol, especialmente a Marbella, “donde los recibimos con los brazos abiertos desde tiempo inmemorial”, según la concejala de Residentes Extranjeros en el Consistorio marbellí, Remedios Bocanegra.

La edil incide en que el Brexit “no ha supuesto un freno como se temió inicialmente, toda vez que siguen viniendo como turistas y como compradores”, si bien reconoce que, desde la salida del Reino Unido de la UE, “los británicos han de viajar con pasaporte y no pueden permanecer más de 90 días en un semestre, a no ser que soliciten permiso de residencia”. Esa posibilidad, “no es la más idónea, ya que cuando se deciden a solicitar el permiso residencia, han de enfrentarse a un procedimiento ciertamente complejo por la ineficacia de los consulados de España en el Reino Unido”. Una circunstancia reiterada en el tiempo que “genera gran malestar según nos consta porque nos lo trasladan, al tiempo que impotencia por el colapso al que asisten cuando han de solicitar ese trámite”.

Con todo, sí existe un importante volumen de residentes fijos, un total de 5517 británicos empadronados -más de 1.350 en los dos últimos años y medio-, pese a que “históricamente han sido reacios a empadronarse, por la creencia y el miedo a que el hecho de fijar su residencia de manera permanente tuviera consecuencias fiscales”.

En cualquier caso, la responsable municipal resalta que, “cuando me reúno con colectivos británicos, me trasladan con orgullo que Marbella sigue siendo un destino atractivo”.

También en la Costa del Sol Occidental, Benahavís, uno de los municipios más rico del país, tiene fuerte presencia de residentes británicos, que representan un tercio de su población censada. Una de las principales motivaciones a la hora de elegir esta localidad es su gran oferta en materia de golf, o la gastronomía, con restaurantes que durante todo el año tienen clientela fija extranjera.

Pero no sólo disfrutan de esos servicios sino que “son propietarios o regentan negocios especialmente en el sector de la hostelería”, según declara el concejal de Turismo del consistorio, Scott Marshall. “Nos sentimos felices y orgullosos de que elijan Benahavís no sólo para vivir sino incluso para dar servicio a sus convecinos”, reconoce un edil que además tiene origen escocés.

Marshall resalta que “su presencia no es sólo importante ahora sino que son un pilar en el municipio desde hace tres décadas, y a buen seguro seguirán siéndolo en tiempos venideros”.

En esta localidad con cerca de diez mil habitantes censados, conocida como el rincón gastronómico de la Costa del Sol y en la que residen grandes fortunas extranjeras, “constatamos su perfecta y plena integración”.

En la Axarquía, parte oriental de la provincia malacitana, municipios turísticos como Torrox, con una amplia colonia de residentes alemanes de manera permanente, comienza a “despuntar” el viajero de origen británico.

El alcalde del municipio Óscar Medina explica que “son unos dos mil, los británicos que residen aquí de manera permanente” seducidos, entre otros atractivos, “por la tranquilidad que encuentran en nuestro centro histórico, o bien en el campo, alejados del mundanal ruido que arrastran de capitales británicas como Londres o Manchester”.

Para el munícipe, “aportan un gran valor añadido a un municipio en el que están perfectamente integrados, no sólo con los lugareños, sino con el resto de extranjeros de otras nacionalidades con las que aquí también conviven”.