Sequía

Solución «definitiva» para La Colada

La Junta de Andalucía invertirá cuatro millones en varias actuaciones en el embalse cordobés que durarán seis meses

Embalse de La Colada, en Córdoba
Embalse de La Colada, en CórdobaLa RazónLa Razón

Pese a la galopante sequía que padece Andalucía, el agua del embalse de La Colada, situado en la provincia de Córdoba, no se puede beber. La Junta de Andalucía la declaró no apta para el consumo humano debido a sus altos niveles de carbono orgánico. Esta infraestructura soporta un extenso rosario de obstáculos administrativos y desencuentros pese a ser vital para una zona, los valles del Guadiato y de Los Pedroches, en el que viven más de 80.000 personas. Ahora, la Junta y la Diputación de Córdoba han dado un paso decisivo para «plantear soluciones definitivas y estructurales a la situación que sufre la zona norte de la provincia en materia de agua», tal y como aseguró el presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes.

La medida estrella de este paquete de actuaciones es la adquisición de una potabilizadora de última generación, gracias a una inversión de cuatro millones de euros por parte de la Administración autonómica. Las acciones se pondrán en marcha en un plazo no superior a seis meses. «Si no llueve, en otoño vamos a tener un problema muy grave. Por nuestra parte lo que podemos ofrecer son soluciones técnicas, comprometidas en el tiempo y presupuestariamente ciertas», señaló Fuentes.

Por su parte, el delegado de la Junta en Córdoba, Adolfo Molina, anunció la «inminente licitación de la conexión de La Colada con Sierra Boyera, con un total de once millones de euros, a lo que se suman los 15 proyectos de depuración que, por valor de 42,3 millones de euros, la Junta de Andalucía en auxilio de la administración local, está desarrollando en el Guadiato y Los Pedroches».

Gabriel Benítez, técnico de la empresa Emproacsa, detalló las cuatro medidas que se pondrán en marcha por parte de la empresa provincial y con financiación de la Junta de Andalucía, «siendo la primera de ellas, actuar en el foco del problema que es el propio embalse de La Colada, debido a la importante cantidad de materia orgánica y a la consecuente producción de algas».

Por ello, según continuó Benítez, «vamos a aplicar ultrasonidos, una buena opción para comenzar a atajar nuestro problema. Una vez que hagamos este trabajo, seguiremos preparando el agua para su tratamiento y se hará con oxidación, a través de dióxido de cloro, para lo que se montará un generador de dióxido de cloro, segunda media».

«Posteriormente se llevará a la ETAP de Sierra Boyera, donde para tratar el crecimiento algar que se produce en la planta, se propone la cobertura de todos los recintos de la misma». Finalmente, según el técnico de Emproacsa, «se utilizará un sistema novedoso de flotación para eliminar las algas».