Huye de la ola de calor y ponte a 28 grados: emocionante plan gratuito muy próximo a Aragón

Es evidente que Cataluña forma un recomendable destino vacacional, que satisface siempre las necesidades a todo tipo de turistas: si se quiere tranquilidad y paseos por la playa, los pueblos con encanto de la Costa Brava son imprescindibles, pero si lo que se busca es disfrutar de calles con historia y descubrir monumentos arquitectónicos inigualables, esta comunidad autónoma también cuenta con muchas alternativas.

Sí que es cierto que en esta conocida combinación de municipios excepcionales y múltiples actividades, el sur de Cataluña parece caer en el olvido. Pero esta zona catalana tiene mucho que ofrecer, como por ejemplo este excepcional oasis emplazado en ‘les terres de l’Ebre’.

No sufrirás masificación turística

En el sur de la provincia de Tarragona, exactamente entre las sierras de la Mola y el Crestall, se ubica un tesoro natural que sigue ajeno al turismo masivo: las piscinas naturales de La Fontcalda. Y es que este espacio natural de ensueño, situado en Gandesa, municipio de la comarca de la Terra Alta, cuenta con un balneario natural al aire libre, donde las aguas termales están a 28 grados constantemente.

'La Fontcalda' deriva del catalán y quiere decir 'fuente caliente', remitiéndose directamente a las agradables aguas termales del tranquilo balneario. Estas son ricas en minerales como sulfato de magnesio, carbonato cálcico, cloruro, y cloruro sódico, componentes naturales que ofrecen beneficios terapéuticos, sobre todo para curar afecciones de piel y problemas reumáticos.

Pero más allá de esta maravilla de la naturaleza en estado puro, el ligar ofrece al visitante otros puntos de interés turístico como este: el Santuario de la Virgen de la Fontcalda, original del siglo XIV, es uno de ellos. El edificio religioso ha sido históricamente un sitio de peregrinación gracias a las cualidades curativas de las aguas termales.

El delta del Ebro o Tortosa: todo lo que ofrecen

Y, si quieres sacarle todavía más provecho a tu visita al balneario, puedes sumergirte en la zona sur de Cataluña, donde están las piscinas naturales de La Fontcalda. El Delta del Ebro, sin ir más lejos, es uno de los espacios húmedos más importantes de Europa, y destaca por su biodiversidad, por la garza real o el flamenco rosado, por ejemplo. Una experiencia muy recomendable es recorrer sus arrozales en bicicleta, hacer rutas en kayak o conocer la Punta del Fangar, una lengua de arena con un faro mítico.

Tortosa, municipio histórico del sur, también es un lugar imperdible. Su castillo de la Zuda, de estilo árabe, permite panorámicas espectaculares del río Ebro, mientras que su catedral gótica también merece la pena: tanto por dentro como por fuera

Lo que tampoco debe perderse ningún visitante de la zona es la gastronomía tan exclusiva que tienen, con la anguila en suc o el arroz negro como propuestas más destacables. Para los amantes del vino, en la Terra Alta, hay bodegas con exquisitos blancos y también tintos.