Debate

¿Veto a los menores en los toros de los pueblos? Imploran la controvertida medida tras el incidente mortal en Gelsa

En Aragón está permitida la participación de menores de 14 años en estas actividades propias de festejos tradicionales

Corrida de vaquillas con menores
Corrida de vaquillas con menoresLa Razón

La Fundación Franz Weber (FFW) ha hecho un llamamiento “a una profunda reflexión política y ciudadana” tras el trágico fallecimiento de un varón durante una suelta de vaquillas en Gelsa, en la Ribera Baja del Ebro. Los naturalistas argumentan que "durante las sueltas, encierros, también en novilladas o corridas, la presencia de personas menores de edad es habitual, con lo que pueden visualizar tanto la violencia ejercida sobre los animales como su respuesta ante las personas participantes".

Desde la FFW se recalca que, en este tipo de eventos, se expone a los más jóvenes a situaciones de riesgo y violencia. "Estos niños y niñas acaban contemplando escenas realmente dramáticas, como lesiones invalidantes o la muerte de personas en un contexto para el que son reforzados: comentarios positivos, actividades amparadas en ritos culturales o tradicionales o imitación de personas adultas", subrayan. Ante esta realidad, la organización propone una medida contundente: vetar el acceso de menores a estos actos, una decisión que, según ellos, el Gobierno de Aragón podría tomar cumpliendo con las objeciones realizadas por el Comité de los Derechos de la Infancia (CDN) en 2018 y 2023.

Aragón, un caso atípico

La comunidad aragonesa, según la FFW, tiene una particularidad que agrava aún más esta situación. Aragón es uno de los pocos lugares “que posibilita la participación de menores de 14 años en estas convocatorias, de acuerdo con su reglamentación taurina propia, exponiéndolos a los mismos riesgos que cualquier persona adulta, incluso el fallecimiento”. Este hecho, sumado a las muertes y lesiones que se registran cada año, ha llevado a la organización a cuestionar la idoneidad de este tipo de festejos. Desde la fundación, se destaca la incoherencia de este modelo de ocio al compararlo con otros tipos de entretenimiento.

“De este modo, mientras que delante de un televisor o una tablet existen condicionantes de edad y advertencias según el contenido, en las convocatorias taurinas no hay cortapisa alguna”, destacan. Este contraste subraya la necesidad de una regulación que proteja a los menores, no solo del riesgo físico, sino de la exposición a la violencia. La muerte en Gelsa se convierte así en un catalizador para un debate que, según la FFW, ya no se puede eludir.

El debate sobre el riesgo y la tradición

El trágico incidente en Gelsa, que ha acabado recientemente con la vida de un varón de avanzada edad, ha puesto sobre la mesa una vez más la discusión sobre si las fiestas tradicionales que implican riesgos deberían ser reconsideradas. Las actividades de supuesto ocio que se celebran en Aragón y en el resto del país “cosechan en Aragón, y en el Estado español, muertes y decenas de personas lesionadas de diversa consideración”.

La posición de la Fundación Franz Weber es clara: lo ocurrido en Gelsa es una muestra más de las consecuencias de una tradición que, en su opinión, debe ser objeto de una profunda revisión. El debate, por lo tanto, no se centra únicamente en la protección animal, sino en la seguridad pública y, sobre todo, en la protección de los menores, a quienes se les permite el acceso y la participación en eventos que acarrean riesgos tan graves como la muerte.