Inmigración

Mauritania rescata a 119 inmigrantes rumbo a Canarias tras una avería en alta mar

La embarcación partió de Gambia el 1 de septiembre y entre los rescatados hay nacionales de Gambia, Senegal y Guinea

Cayucos en el puerto de pescadores de Dakar.
Cayucos en el puerto de pescadores de Dakar.Alfonso Masoliver Sagardoy

La Guardia Costera de Mauritania interceptó y auxilió este domingo a una embarcación artesanal que navegaba al borde del naufragio frente a la localidad costera de Imhijrat. A bordo viajaban 119 inmigrantes que, según las primeras informaciones oficiales, habrían zarpado desde Gambia con la intención de alcanzar el archipiélago canario. El motor falló en alta mar y el casco comenzó a hacer agua hasta quedar a punto de hundirse. Todos los ocupantes fueron evacuados y trasladados a Nuakchot para recibir atención conforme al protocolo.

El Ministerio de Pesca mauritano detalló que en el cayuco viajaban 54 ciudadanos de Gambia, 50 de Senegal y 15 de Guinea. La travesía, que comenzó el 1 de septiembre, se prolongó una semana hasta que la avería dejó la barca a la deriva. La alerta movilizó a unidades de la Guardia Costera y a otras embarcaciones que colaboraron en la operación de salvamento.

El operativo se produce apenas cuatro días después de que las autoridades del país interceptaran en aguas del Atlántico otra embarcación con más de 170 personas, varias de ellas en estado grave, lo que confirma la intensidad de salidas en esta ruta a comienzos de septiembre.

Una ruta corta en mapas

Los itinerarios entre la franja atlántica de África occidental -Gambia, Senegal, Mauritania- y las Islas Canarias son frecuentes y estacionales. Aunque en mapas parezcan trayectos “cercanos”, suponen cientos de millas en mar abierto, con corrientes, vientos y oleaje que complican la navegación de cascos de madera sobrecargados y sin equipos adecuados. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) sitúa a Mauritania como país de tránsito y destino para inmigrantes de África occidental y central, y advierte del incremento de riesgos en esta vía oceánica.

En términos de víctimas, distintas fuentes coinciden en que la ruta atlántica hacia Canarias es una de las más mortales del mundo. La OIM y medios internacionales han documentado miles de muertes y desapariciones desde 2014 en este corredor, y el año 2024 cerró con cifras muy elevadas; organizaciones como Caminando Fronteras suelen reportar balances incluso más altos.