El comercio tradicional, prioritario

El pequeño comercio es otro de los sectores que peor lo está pasando desde que comenzara la crisis sanitaria del coronavirus. Castilla y León quiere echar una mano a los comerciantes para que puedan salir adelante y trabaja en un nuevo paquete de ayudas dirigidas a la modernización y digitalización de este sector, del que viven decenas de miles de familias en la Comunidad.

Así, según ha anunciado este lunes la consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, el próximo mes de abril se convocarán las nuevas ayudas por valor de 2,4 millones de euros para dar vida a los pequeños comercios, que darán continuidad a las que ya se pusieron en marcha en diciembre.

Por una parte, se habilitarán subvenciones para financiar proyectos de inversión dirigidos a modernizar, digitalizar o mejorar la gestión de las pymes comerciales en Castilla y León, fomentando la implantación de buenas prácticas medioambientales, eliminación de barreras arquitectónicas, mejorara de la comercialización o desarrollo de iniciativas de formación, entre otras. Esta iniciativa cuenta con un crédito inicial de un millón que podrá ampliarse en la misma cantidad si fuera necesario.

Otra línea de ayudas irá destinada a promover la comercialización y a garantizar el abastecimiento de productos cotidianos en el medio rural. Estás subvenciones, con una partida inicial de 200.000 euros, podrán solicitarse tanto para iniciativas en la tienda física como para el reparto con vehículo, siempre que este afecto a la actividad comercial ejercida en el establecimiento comercial,

También se convocaran en abril subvenciones destinadas a las asociaciones del sector para la promoción del comercio, con un presupuesto de 600.000 euros, para tratar de favorecer fundamentalmente el consumo en el comercio de proximidad, así como la cooperación entre establecimientos.

La consejera anunciaba estas nuevas medidas en la localidad leonesa de Benavides de Órbigo, donde presidía el acto de entrega del Premio Provincial de Comercio Tradicional al establecimiento Telecomunicaciones los Ocho Caños, cuyo gerente, Juan Carlos Rodríguez, recogía el galardón en la sede social de la compañía, que cuenta con otras 15 tiendas y 24 trabajadores de plantilla.

Dedicada inicialmente al accesorio del automóvil y electrónica, ha ampliado sus servicios para orientarse hacia el mundo tecnológico y de las telecomunicaciones.

“Esta empresa es un ejemplo de que en los pueblos se puede tener actividad moderna, necesaria, relacionada, por ejemplo, con los nuevos fondos europeos de digitalización”, destacaba Amigo, para quien el mundo rural “tiene futuro”.

Los Premios de Comercio Tradicional de Castilla y León distinguen las actuaciones llevadas a cabo por las pequeñas y medianas empresas del sector del comercio para mejorar su competitividad, desarrollar buenas prácticas comerciales y modernizar sus negocios. En este sentido se valoran aspectos como la innovación, la calidad, la marca, la formación, la promoción, las acciones de fidelización de clientes, el crecimiento de la empresa o los procesos de digitalización.

La convocatoria que tiene una periodicidad anual establece un premio de carácter regional y nueve premios provinciales y el galardón entregado esta mañana corresponde a la convocatoria del pasado año, que se falló en noviembre sin que pudiera hacerse la entrega física de los premios como consecuencia de las restricciones sanitarias.