La hostelería de Castilla y León podrá abrir hasta las 12 de la noche tras levantarse el Estado de Alarma

Tras el levantamiento del Estado de Alarma el próximo 9 de mayo la normalidad estará más cerca, sobre todo para el sector de la hostelería de Castilla y León. Y es que a partir de este momento los establecimientos podrán abrir hasta las 12 de la noche, siempre que se esté en nivel 3 y 4 de alerta de la situación epidemiológica, que irán aumentando según vayan mejorando las circunstancias.

Así lo anunció el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, y añadió que “sin una herramienta jurídica, no tiene sentido restringir el horario”, porque se trasladaría las reuniones en “los bares a las casas, lo que es absurdo”.

En este sentido, reiteró que con esos horarios de la hostelería la Comunidad busca que al decaer el toque de queda no se trasladen las reuniones al interior de los domicilios, donde no hay ninguna seguridad de distancias.

En la misma línea, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en su perfil de la red social Twitter señaló que ante “el alto ritmo de vacunación y la buena evolución actual de la pandemia nos permite avanzar en la recuperación económica y la flexibilizacón de las medidas”.

A pesar de esa mejoría, Francisco Igea volvió a apelar a “la prudencia y precación” de la ciudadanía, ya que el virus todavía está y con la apertura y los datos que existen en otras Comunidades Autónomas hay que estar alerta para no incrementra los contagios. Al respecto, recordó que “en estos momentos hay más de 150 personas intubadas en las UCIS de la Comunidad, que están luchando por su vida”.

Además, el vicepresidente de Castilla y León precisó que al decaer el estado de alarma deja de estar en vigor el cierre perimetral de la Comunidad, el toque de queda, el número de personas reunidas y el límite de aforos en iglesias, si bien se mantiene el semáforo con el cierre del interior de la hostelería con una incidencia de 150 casos en catorce días.

“Trasvase de incidencia” otras Comunidades

Además, Francisco Igea auguró un “trasvase de la incidencia” de Comunidades vecinas, principalmente en relación a País Vasco, Aragón y Madrid, una vez que el próximo domingo decaiga el cierre perimetral de Castilla y León al quedar sin efecto el estado de alarma desde las 00.00 horas del domingo.

Al respecto, recordó que caen también los posibles confinamientos, el toque de queda, las limitación de reuniones y aforos en iglesias, que “quedan suspendidas” al entender que no existe ninguna seguridad jurídica. En estos momentos, informó de que la incidencia a 14 días por cada 100.000 habitantes es de 175 casos en Castilla y León, pero en la autonomía vasca alcanza los 478 y en Madrid, los 329. “Lo más probable es que se produzca ese trasvase de la incidencia, al incrementarse la movilidad; esto se traducirá en un incremento previsible de la incidencia”.

También recordó que la Junta podría confinar municipios, entidades locales y edificios, pero aseguró que no se lo plantean en este momento. “Ya vimos que era altamente difícil. No tuvo incidencia y no repetiremos los errores”, espetó Igea, quien recordó que en poblaciones del alfoz de las capitales se provocó incluso un problema de abastecimiento. “Si tomas decisiones, mal; si no las tomas, mal también. Es una tomadura de pelo. Unos señores mayores de edad nos van a estar tomando el pelo”, aseveró, en sus críticas hacia el Gobierno y en especial hacia el delegado en la Comunidad, Javier Izquierdo. Dada la cercanía con el País Vasco, respondió que la Junta no puede confinar Burgos y no hacerlo con Soria, Ávila o Segovia. “El Gobierno de Pedro Sánchez es responsable de que esto ocurra”, reprochó.

Igea declaró que estos datos se producen en un momento en el que la situación sanitaria de la Comunidad “continúa con un descenso lento pero continuado de la incidencia”. Además de las cifras a 14 días, aportó la de una semana, que se encuentra en 80 por cada 100.000 habitantes. Importante es el descenso, añadió, en mayores de 65 años gracias a la vacunación: este colectivo cuenta con una incidencia, a siete días, de 50 casos (un 37 por ciento menos que la del conjunto de la población).

A día de hoy, más del 96 por ciento de los mayores de 70 años ya cuentan con la primera dosis inyectada; el 63,3 por ciento de los de 60 a 69; así como el 94 por ciento de mayores de 90 años. Igualmente, la población mayor de 60 años acumula casi el 80 por ciento de la mortalidad de la pandemia y “por ello bajan las tasas de mortalidad de forma acelerada”. “Aunque sí se ha producido una cuarta ola de ingresos hospitalarios, no ha sido el caso con la mortalidad”, concluyó el vicepresidente, para aclarar que las medidas tomadas no las hacen “ni desde el miedo ni la resignación”.