Un “pacto global” y un “compromiso irrenunciable” con la Sanidad rural

Un “pacto global” y un “compromiso irrenunciable” con la Sanidad pública, en especial con el medio rural. Es lo que ha reivindicado el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, al inaugurar el nuevo centro de Calzada de Valdunciel (Salamanca), que dará servicio a más de 2.200 personas, en un acto donde han estado presentes la consejera de Sanidad, Verónica Casado, así como el presidente de las Cortes, Luis Fuentes.

Durante su intervención, el presidente ha asegurado que Castilla y León cuenta con una sanidad rural de de calidad, que se sitúa entre las mejores de España y que dispone de la mayor red de centros y consultorios, algo que contribuye a que también tenga las mejores ratios de médicos por habitantes.

Además, ha asegurado que el Ejecutivo autonómico sigue invirtiendo para mejorar esas infraestructuras y plantillas sanitarias, así como para modernizar los equipamientos. El objetivo es contar con una Atención Primaria más fuerte, con mejores dotaciones y más capacidad de resolución; mejorar la atención continuada, con nuevos recursos de soporte vital y equipos móviles; y seguir renovando infraestructuras sanitarias allí donde se necesitan. En este punto, el presidente ha aludido al nuevo Hospital de Salamanca, un centro referente en asistencia, investigación y docencia, más accesible para las personas y con tecnología a la vanguardia de Europa.

El presidente también ha explicado que para reforzar la sanidad pública de Castilla y León se buscará la unidad y se escuchará a todos: colegios profesionales, sindicatos, partidos políticos… “Tiene que haber un pacto global para reforzar la sanidad pública”, ha afirmado.

El nuevo centro de salud de Calzada de Valdunciel, con mil metros cuadrados más de superficie construida, es un centro mucho más amplio, moderno, confortable y avanzado que el anterior, lo que permitirá dar servicio a los 2.200 pacientes de la zona de salud.

Un centro que se ha convertido en realidad en tan solo dos años y en medio de una pandemia, gracias a un ambicioso proyecto técnico y arquitectónico que conserva la estructura y la fachada exterior del antiguo cuartel de la Guardia Civil.