Se desbloquea la investidura de Mañueco

Por fin, y tras varias semanas de incertidumbre y casi exasperación, este jueves se reunirá la Mesa de las Cortes y la Junta de Portavoces para abordar la fecha de la investidura de Fernández Mañueco, conforme alacuerdo entre PP y Vox para conformar un gobierno de coalición, que se fijará para este lunes próximo, según ha confirmado el portavoz del PP en las Cortes, Raúl de la Hoz, en su cuenta de Twitter.

El presidente de las Cortes, Carlos Pollán, ha comunicado este martes la reunión de este jueves, lo que desbloquea una situación que daba la sensación que se estaba enquistando ante la falta del acuerdo definitivo por unos flecos que no se terminaban de resolver y ambas formaciones, PP y Vox, empezaran a culparse mutuamente de este retraso.

Finalmente, la investidura se llevará a cabo con Núñez Feijóo como presidente del PP, tras el Congreso extraordinario de este pasado fin de semana que daba por finalizada la etapa de Pablo Casado y se daba la bienvenida por aclamación a la del líder gallego, todavía presidente de Galicia, que esta mañana en Onda Cero no ha dejado claro si estará o no presente el día de la investidura de su amigo Mañueco. “Dependerá de la agenda”, ha dicho en la entrevista radiofónico.

La fecha de la investidura de Mañueco estaba pendiente desde que el pasado 18 de marzo fuera propuesto como candidato por reunir “la mayoría suficiente, según dijo Pollán, y cuatro días más tarde se publicó en el Boletín oficial de Castilla y León (Bocyl).

Ante el retraso, todos los partidos de la oposición han reiterado que urge la celebración de la investidura para que tome posesión el nuevo gobierno de coalición tras casi tres meses de Gobierno en funciones, desde que el pasado 20 de diciembre Mañueco disolviera las Cortes y convocara elecciones para el 13 de febrero.

Desde entonces, los consejeros del PP han estado trabajando de forma normal y en funciones y ocupando las que dejaron vacantes los miembros de Ciudadanos (Empleo e Industria, Cultura y Turismo, Transparencia y Sanidad)

PP y Vox firmaron un acuerdo minutos antes de que comenzara la sesión de constitución de las Cortes regionales, en la que se eligió a Pollán como presidente de la Cámara, y donde se incluía un texto inicial para la gobernabilidad compuesto por once ejes y más de una treintena de acciones, que debía de pulirse hasta el acuerdo final que permitiera la investidura de Mañueco.

El pacto incluía también la vicepresidencia de la Junta para Vox, y más en concreto para su candidato a la Junta y procurador electo por Burgos, Juan García-Gallardo, además de tres consejerías.

La semana pasada se desvelaba que estas consejerías eran Cultura y Turismo, que desempeñará Gonzalo Santonja; Empleo e Industria, que gestionará Mariano Veganzones; y la de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, que manejará Gerardo Dueñas.

El retraso no ha gustado a los partidos de la oposición, pero ha molestado especialmente a los socialistas, que llevan semanas atacando al Gobierno de Mañueco en funciones y al propio presidente por estar “arrodillado y sometido” a los chantajes de Vox, además de pedir a Feijóo que parara el“pacto de la vergüenza”que, en opinión del PSOE, representa el del PP y Vox en Castilla y León. E incluso han intentado pedir al presidente de las Cortes mediante una propuesta registrada en el Parlamento que convocara a la Junta de Portavoces para abordar la fecha de la investidura, pero sin éxito a la vista de la situación.

Hoy mismo, el secretario regional del PSOE, Luis Tudanca, naca más conocerse que se desbloquea la investidura, ha recordado que Castilla y León lleva más de tres meses “paralizada” y sin presupuestos “en un momento critico y decisivo”. Además, califica de “semanas vergonzosas y vergonzantes” el proceso de negociación entre PP y Vox que ha definido como “opaco”, y advierte del “precio pagado” por Mañueco por este acuerdo que, en su opinión, irá en forma de recorte de derechos, libertades y del Estado del bienestar.

Pero como la vida misma, al final, todo llega, y parece que este lunes, en plena Semana Santa, “Habemus papam”(tenemos Papa) en Castilla y León, en referencia al anuncio en latín con que el cardenal protodiácono informa que ha habido fumata blanca y un nuevo Papa ha sido elegido.

Acuerdo definitivo

Y es que tras casi un mes de discretas negociaciones, Partido Popular y Vox han cerrado definitivamente su acuerdo para la gobernabilidad de Castilla y León durante los próximos cuatro años de legislatura. Ambas formaciones han resuelto los flecos pendientes que impedían el acuerdo final y que han mantenido en vilo a la Comunidad además de provocar el retraso del pleno de investidura de Fernández Mañueco.

Al respecto, PP y Vox han consensuado la puesta en marcha de comisiones de seguimiento del programa de Gobierno así como para la elaboración, autorización, seguimiento y evaluación de la planificación de las campañas de publicidad institucional, en las que tendrá participación García-Gallardo.

En cuanto a las funciones del vicepresidente de la Junta, que en esta legislatura no tendrá consejería como ocurrió con Francisco Igea, de Ciudadanos, en el anterior Gobierno de coalición, se encuentran la de ser el representante institucional en sustitución del presidente Mañueco, además de presidir la Comisión Delegada del Gobierno y la Comisión de Simplificación Administrativa, con los procedimientos ambientales incluidos.

García-Gallardo, además, ocupará la representación suplente en el Comité de las Regiones; el Comisionado de las Víctimas del Terrorismo; la representación institucional en las relaciones con el Consejo Consultivo y el Procurador del Común, así como con las fundaciones, asociaciones y colegios profesionales.

La Ley de violencia intrafamiliar, antes de agosto

Por otra parte, ambas formaciones han acordado que antes del 30 de junio de este año comenzará la tramitación de una normativa en materia de concordia, en virtud del punto tres del acuerdo, y que antes del 31 de julio también de este año se iniciará la tramitación para elevar a rango de Ley la regulación en materia de violencia intrafamiliar, según se recoge en el apartado 10 del documento de Gobierno firmado el 10 de marzo.

Tanto el PP como Vox se comprometen a impulsar un Ejecutivo «sólido, fuerte y, sobre todo, estable», para cuatro años de legislatura, pensando en los intereses de Castilla y León y España.

Además, garantizarán unos servicios públicos de calidad; reforzarán su implicación con el mundo rural; y aumentarán el apoyo a la natalidad, la familia y las empresas.