Sociedad
Tordesillas celebra el encierro del Toro de la Vega sin altercados
Miles de personas siguen el festejo, protagonizado por “Manjar”, de 560 kilos, con numerosa presencia de la Guardia Civil y escasa de animalistas
La localidad vallisoletana de Tordesillas ha celebrado este martes con normalidad, dentro de lo que cabe, y sin altercados, que es lo más importante, el tradicional festejo del Toro de la Vega, que se ha vuelto a celebrar como un encierro, sin dar muerte al animal, según la Ley autonómica de 2016, y sin poder clavar al animal, de nombre “Manjar” y un peso de 560 kilos, ningún arpón o divisa similar a las que lucen las reses en las corridas de toros, novillos y rejones, tal y como el Ayuntamiento de Tordesillas había aprobado hace unos meses para que el festejo fuera lo más parecido a lo que se celebraba antes de que entrara en vigor la normativa regional hace seis años y recuperara su esencia como torneo entre el hombre y el animal
A las once en punto de la mañana, puntual, se desenjaulaba desde la Cuesta del Empedrado de la Villa del Tratado al astado en dirección al puente, que atravesó con rapidez hasta llegar a los pinares de Valdegalindo donde se desarrollaba la mayor parte del encierro
Un festejo en el que la Guardia Civil desplegó a numerosos agentes para garantizar la seguridad y evitar problemas entre los aficionados del pueblo y los animalistas, que habían anunciado hace semanas protestas que finalmente no se produjeron debido a que le pasado viernes el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León decidiera suspender de forma cautelar el renovado torneo que proponía el Consistorio que preside Miguel Ángel Oliveira, en el que se abría la posibilidad de utilizar arpones con cintas clavados para dilucidar al vencedor.
El encierro, muy rápido, debido a la velocidad y fuerza con la salió el astado de la ganadería de Albarreal -en apenas tres minutos el animal estaba ya en la zona conocida como La Vega para deleite de los caballistas, dejó algunos momentos de peligro, especialmente en la rotonda, y varios heridos por contusiones, al menos uno de gravedad evacuado al hospital Río Hortega de Valladolid.
además del cabreo y malestar de la gran mayoría de los vecinos y aficionados a los toros, que se han quedado con las ganas de disfrutar de un festejo que consideran que con el Reglamento que había aprobado el Ayuntamiento podría recuperar su esencia sin hacer daño al animal como marca la ley.
Como preludio al Toro de la Vega, anoche se celebraba un encierro mixto por las calles de la Villa con toros de la prestigiosa ganadería de Fuente Ymbro, habituales en Pamplona, en el que se vivieron también algunos momentos de tensión, sobre todo a la entrada a la plaza cuando un manso arrolló a un hombre causándole fuertes magulladuras y, sobre todo, un tremendo susto.
El PACMA no se conforma
A pesar de la suspensión cautelar del festejo, el Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (PACMA) no se conforma y ha denunciado la autorización administrativa concedida por la Junta de Castilla y León para la celebración en Tordesillas del encierro del Toro de la Vega, que ha sustituido, junto al encierro nocturno de anoche, el festejo de hoy.
En su denuncia, los animalistas invocan el artículo 25 del Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares de Castilla y León, que obliga a presentar las solicitudes con una antelación mínima de diez días naturales a la celebración del festejo
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