Gallardo pide a Bruselas que anteponga la rentabilidad agraria frente al “fanatismo climático”

El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, se ha reunido hoy en Bruselas con el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, en compañía del consejero Gerardo Dueñas y del jefe de la Delegación de Vox en el parlamento europeo, Jorge Buxadé.

Un encuentro que el número dos de Mañueco ha calificado como “muy constructivo”, pero en el que ha aprovechado para pedir a la Europa de la Unión que, ante la delicada situación del campo debido a la covid y la incertidumbre internacional, que anteponga la rentabilidad agrícola y ganadera en detrimento del “fanatismo climático”.

“Europa debe anteponer las necesidades de las personas y del mercado a la agenda climática”, apuntaba el dirigente burgalés de Vox, quien se comprometía a seguir defendiendo en Castilla y León los intereses de los agricultores y ganaderos a través de la Consejería que dirigen de la mano de Dueñas.

Durante la reunión, el vicepresidente hacía entrega al comisario europeo de un manifiesto por la soberanía alimentaria y en contra de la competencia desleal extranjera, y le trasladaba las prioridades de actuación de la Junta de Castilla y León para el sector agrícola de la región. “La competencia desleal extranjera está haciendo un terrible daño a los productores en España y al mercado en su conjunto al no exigir los mismos requisitos, por ejemplo, en materia de fitosanitarios a nuestros productores que a los extranjeros”, apuntaba García-Gallardo.

“Ahora más que nunca, ante tanta inestabilidad política y debilidad económica, es cuando hay que defender los intereses del sector primario”, decía García-Gllardo, mientras apuntaba que el reto pasa por alcanzar una “soberanía alimentaria”, a fin de “asegurar las cadenas de suministro”.

“Las políticas que se lleven a cabo deben tener siempre en cuenta y poner en el centro a la persona: no cabe preocuparse solo de los derechos de los animales y ni que los trabajadores europeos se vean sometidos a regulaciones de extrema exigencia para, al mismo tiempo, que los países europeos importen alimentos de terceros países”, reza este documento.

Un texto en el que demandan una PAC fuerte y que mejore el rendimiento de las explotaciones agrarias y que se proteja la producción agrícola europea y la garantía de suministro de fertilizantes.

También reclama unas cadenas de suministro propias, que sean fuertes y resistentes, frente a esta competencia desleal extranjera, y establecer existencias estratégicas públicas adecuadas para evitar la especulación excesiva y asegurar así la disponibilidad de alimentos a precios razonables.

“Wojciechowski) ha entendido muchas de las peticiones. Ha dicho que las va a estudiar. Sin ir más lejos, por lo que respecta a la competencia desleal extranjera, ha dicho de hacer un esfuerzo especial para incluir clausulas espejo en los tratados bilaterales de libre comercio con terceros países y confiamos con que eso sea así”, desvelaba el vicepresidente, no sin antes reclamar también una mayor homologación entre las normas de la producción agrícola en la Unión y las normas que se exigen a los productores de países terceros que quieran exportar sus alimentos al mercado común.