Campos

Posadas reivindica la Ley de Cadena Alimentaria: “Es vital para evitar abusos”

El presidente de ACOR destaca que en la cooperativa “siempre” buscan la rentabilidad del agricultor y promover una labor social

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, y el presidente de ACOR, Jesús Posadas, abren en la planta de aceite de la sociedad, en Olmedo, el encuentro "Del campo a la industria"
El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, y el presidente de ACOR, Jesús Posadas, abren en la planta de aceite de la sociedad, en Olmedo, el encuentro "Del campo a la industria"LETICIA PEREZAgencia ICAL

La fábrica azucarera de la Cooperativa ACOR en la localidad vallisoletana de Olmedo ha acogido este viernes un nuevo foro, y van cuatro, del ciclo “Del campo a la industria”, que impulsa la Diputación de Valladolid con la colaboración de los empresarios agroalimentarios, con el objetivo de dar a conocer los productos de la provincia y poner en valor su cultivo y producción así como su importancia en el desarrollo económico y social de Valladolid y sus pueblos además de echar una mano al campo, en unos momentos tan complejos y con tanta incertidumbre por los precios y la situación bélica en Ucrania.

El presidente de ACOR, Jesús Posadas, como anfitrión, daba las gracias a la institución provincial y a los empresarios del sector por haber escogido la planta Olmedo como sede para este foro pero también por organizar este tipo de actividades que, en su opinión, hacen mucho bien al campo y al sector agroalimentario.

Además, aprovechaba para reivindicar la necesidad de que, ante momentos como el actual, se mire más a la rentabilidad de los agricultores y ganaderos y menos a otras cuestiones, como pueden ser las medioambientales, y defendía la Ley de la Cadena Alimentaria para intentar frenar los “abusos” que se han cometido por parte de algunas industrias en determinados productos.

“Esta Ley es vital para los intereses de las gentes del campo”, decía Posadas, en declaraciones recogidas por Ical, donde recordaba que ACOR, como cooperativa que es, no tiene que corregir ningún desequilibrio entre el cultivador y el transformador porque ellos “siempre” buscan la rentabilidad del agricultor además de una labor social.

En este sentido, recordaba que esta semana han anunciado un nuevo aumento del precio de la remolacha que van a pagar al socio remolachero, que será de 65 euros por tonelada, como una medida encaminada a echar un cabe a los agricultores en estos momentos an delicados con los precios tan disparados de los fertilizantes, el gasóil o la luz y la energía, e incluso insistía en que no descarta nuevas subidas de este precio por tonelada mínimo garantizado a sus socios para esta campaña que, si todo sigue así, terminará antes de Navidad.

Por su parte, el presidente de la Diputación, Conrado Íscar, tamabién presente en este encuentro,
“Del campo a la industria”, aseguraba que la finalidad del mismo no es otra cosa que poner en valor un sector esencial para la provincia de Valladolid y fomentar las relaciones y el encuentro entre los agricultores y ganaderos y la industria agroalimentaria.

Además, Íscar adelantaba que la intención es que antes de finalizar el año se hayan celebrado otros cuatro encuentros, para alcanzar un total de ocho a lo largo de este año.

A su vez, el también alcalde de Matapozuelos destacaba el papel de ACOR. “Su trabajo -decía- fue fundamental para que la remolacha se convirtiera en el cultivo más social y estratégico de la Comunidad y que ahora está sabiendo adelantarse a los cambios para buscar el equilibrio y la sostenibilidad social y económica de un sector que los últimos meses ha sufrido muchos ataques”.

Finalmente, el gerente de la Asociación de Empresarios del Polígono San Cristóbal y la Diputación de Valladolid, José Ferrández, explicaba que esta serie de encuentros pretenden mejorar la situación del campo y de las empresas agroalimentarias, y apuntaba que el reto es los agricultores y ganaderos pasa porque mejoren las calidades de sus producciones “para que las empresas agroalimentarias locales no tengan que recurrir a productos de fuera”. “El reto es llegar a un equilibrio entre las necesidades de unos y otros”, finalizaba.