Cultura

¿Qué Castillo segoviano es uno de los mejor valorados por las redes sociales?

La fortaleza está considerada como una de las mejores muestras del gótico-mudéjar de España

Castillo de Coca
Castillo de CocaIcalIcal

Las redes sociales están cada vez más presentes en el día a día de las personas. Son muy importantes a la hora de informarnos, de elegir restaurante e incluso de organizar un viaje o la visita a un monumento. Pues una de ellas ha destacado en su web un Castillo de la provincia de Segovia.

El portal turístico en cuestión es "Sitios de España", y en su Instagram, que cuenta con alrededor de 94.000 seguidores, pregunta sobre las fortalezas de España más bonitas, entre las que destacan las de la provincia de Segovia, y una en concreto, la de la localidad de Coca.

Sobre este Castillo, "Sitios de España" asegura que "su construcción asombra y enamora a quienes lo ven por primera vez, pues expresa en cada una de sus formas realizadas con el ladrillo, un conjunto arquitectónico original e imaginativo como pocos. Destaca la belleza singular de sus salas, en las cuales se ven representados hermosos motivos geométricos mudéjares realizados con estucos y pinturas, aportándonos así mismo un legado único e irrepetible. Otra particularidad radica en no haber sido construido sobre un cerro como suele suceder con fortalezas de este tipo, su sistema defensivo aprovecha los escarpes del terreno, el cual sirve de asiento a este castillo".

Y es que el Castillo de Cocaes uno de los mejores considerados por los internautas. Está considerado como una de las más hermosas muestras del arte gótico-mudéjar español. Su construcción asombra y enamora a quienes lo ven por primera vez, pues expresa en cada una de sus formas realizadas con el ladrillo, un conjunto arquitectónico original e imaginativo como pocos.

 

Destaca la belleza singular de sus salas, en las cuales se ven representados hermosos motivos geométricos mudéjares realizados con estucos y pinturas, aportándonos así mismo un legado único e irrepetible.

Otra particularidad radica en no haber sido construido sobre un cerro como suele suceder con fortalezas de este tipo, su sistema defensivo aprovecha los escarpes del terreno, el cual sirve de asiento a este castillo, que se alza sobre un ancho y profundo foso.

Una romántica historia de amor fue protagonizada por el marqués de Cenete, hijo del gran cardenal Mendoza, éste terminó escaldado por las brasas lanzadas desde las almenas, cuando pretendía a una dama de los Fonseca.

En el año 1453, don Alonso de Fonseca, Arzobispo de Sevilla, recibió el permiso del rey don Juan II de Castilla, para la construcción de este castillo. En el año 1473 se llevó a cabo su ejecución por el maestro alarife Alí Caro, a instancias del tercer señor de Coca Don Alonso de Fonseca, sobrino del Arzobispo. Comenzando asimismo la construcción del cuerpo central de la fortificación de planta cuadrangular y patio de estilo mudéjar, flanqueada por la Torre del Homenaje.

De los Fonseca el Castillo pasó a la Casa de Alba, y en 1928 la Dirección General de Bellas Artes lo declaró Monumento Histórico Nacional, formando parte también del Tesoro Artístico Español. En 1954 pasó al Ministerio de Agricultura, cedido por los propietarios, para que se instalara en ese lugar una Escuela de Capacitación Forestal que sigue funcionando en la actualidad, siendo muy demandada por los alumnos de toda España.

La visita guiada permite contemplar:

- Capilla: La primera sala que se encuentra en la visita, está situada en la planta inferior de la Torre del Homenaje, en ella se albergan algunas tallas románicas y góticas de la Virgen con el Niño. También, dos tablas del XVI de temas religiosos: una Crucifixión y una Anunciación.

- Sala de Armas: Su mayor atractivo se encuentra en la decoración de los muros y el techo. Los mosaicos mudéjares de tonalidades rojas, blancas y azules, la decoración puramente geométrica y la bóveda decorada con nervios góticos otorgan a esta sala un interés especial. En ella también se puede admirar una representación de la azulejería existente en este castillo.

- Sala Museo: En esta sala, existe un Ajimez Mudéjar de dos arcos, restos del patio de armas y palacio original. Además, varias pilastras de mármol de Carrara, una con el escudo de la familia Fonseca. Todo ello conformaba una decoración puramente renacentista.

 

- Galería Torre: En esta sala se pueden admirar algunas armaduras y armas de los siglos XVI y XVII, fotografías que muestran el estado del castillo antes y después de la restauración efectuada entre los años 1956 y 1958.

- Mirador: La fortaleza ofrece desde esta ubiación unas magníficas vistas de la Tierra de pinares, poblaciones colindantes, núcleos de interés, Iglesia de Santa María la Mayor, Torre de San Nicolás y Murallas Medievales. Se sitúa a una altura de 40 metros desde el lecho del foso, y 25 metros desde el patio de Armas.

- Galería Norte: Tras hacer un corto recorrido por el paseo de ronda viniendo desde la torre del Homenaje, la visita continúa en la galería norte de este castillo, en ellase encuentran reproducciones de diferentes documentos relacionados con el castillo y la villa, destacando la Real Facultad del Rey don Juan II de Castilla concedida a Alonso de Fonseca, para que pudiera construir una fortaleza en Coca, fechada en 1453.

- Sala de los Jarros: En sus paredes se representan jarros entre arquerías mudéjares y sobre motivos vegetales. Un friso geométrico de lacería sirve de base a todo el conjunto pictórico. La acústica de esta sala le otorga un atractivo especial que se descubre con la ayuda de los guías.

- Sala de Acceso a la Mazmorra: Es un punto de vigilancia perfecto de la entrada al núcleo de la fortaleza. Su bóveda está completamente pintada con motivos que simulan el ladrillo. Tiene una estrella de David debajo de la ventana. Alguien sugirió en cierta ocasión que desde este lugar se introducía los reos hacia la mazmorra.

- Mazmorra: Esta sala y la que se encuentra sobre ella están unidas por un óculo practicado en el techo en forma de cúpula en dicha mazmorra. La yaga existente entre los ladrillos está realizada de tal forma que es imposible la huida de los encarcelados. Existe otra entrada, así los visitantes pueden acceder al interior de la mazmorra.

Además de por su Castillo, la localidad segoviana de Coca es reconocida por su riqueza patrimonial. Cuenta con numerosos atractivos y templos entre los que destacan:

- Iglesia de Santa María la Mayor: Fueron al menos, nueve iglesias las que tuvo Coca y sólo ésta se conserva completa. En ella, se rinde culto actualmente. Hacia 1520 finalizaron las obras de Santa María, asentada sobre los cimientos de una iglesia románica del siglo XII, la zona baja de la torre está hecha de mampostería, su parte central es completamente de ladrillo y del siglo XVI, la parte superior, tiene un reloj de cuatro esferas, el cual es un añadido de principios del siglo XX.

El cuerpo de la nave tiene forma de cruz latina y su muro está realizado en ladrillo. Los contrafuertes, las columnas interiores, los nervios de la bóveda y las ventanas son de piedra caliza. La bóveda interior es de estilo gótico, con cinco tramos, pudiéndose observar las nerviaciones cuyos remates obedecen a soluciones necesariamente estructurales, también realizadas en piedra caliza. El retablo mayor de orden corintio, con corte clásico preside el templo.

 

Sus obras de mayor importancia artística son los sepulcros de la familia Fonseca, realizados en mármol de carrara por Doménico Fancelli y Bartolomé Ordóñez. Si se mira frontalmente al altar mayor situamos en el lado izquierdo el sepulcro de don Fernando de Fonseca y doña Teresa de Ayala. En el lado derecho, don Alonso de Fonseca y su madre, doña María de Avellaneda. Al dirigirse el visitante hacia el altar mayor, a la izquierda el sepulcro corresponde a don Alonso de Fonseca, arzobispo de Sevilla y a la derecha don Juan Rodríguez de Fonseca obispo de Burgos. Queda finalmente una sencilla sepultura en el mismo crucero, la de don Antonio de Fonseca, Contador Mayor de Castilla.

- Muralla Medieval: De la potente muralla que llegó a circundar gran parte de la villa de Coca, hoy en día tan sólo quedan en pie unos 200 metros de longitud, con cuatro torres flanqueantes, parapeto almenado y la puerta de entrada llamada puerta de Segovia o Arco de la villa, una de las tres que existieron en otro tiempo, las otras dos entradas fueron, la Puerta de San Adrián o Puerta Norte y la Puerta Mediana o Puerta Oeste.

Hay un fragmento incrustado en el castillo, posee una longitud de unos treinta metros que se prolonga por la pared interna de la misma fortaleza, el fragmento visto cuenta con una torre poligonal, cuya traza es muy diferente al resto de torres de la propia muralla. En la Cauca celtibérica y romana existió otra muralla, de la que nos hablan los textos con motivo del asalto que Lúculo llevó a cabo en 151 A.C.

En el año 1785 se derribaron unos importantes lienzos de muralla, para airear la villa y terminar con la peste que en ella había. Muchas casas, fueron construidas o arregladas a expensas de los materiales del muro. En 1800 son vendidos mil carros de piedra de muralla para distintas obras que se realizaban en las proximidades de Coca. El Puente Chico fue uno de los receptores de dicha piedra. También se derribó parte de otro lienzo para construir la antigua fábrica de vidrio en 1804. Dicho esto, ha sido utilizada como cantera de piedra, razón por la cual ha desaparecido hasta quedar los restos que podemos contemplar actualmente.

- Puerta de la Villa: Era una de las tres puertas de acceso a la población que existieron en otro tiempo. Es la puerta de Segovia que daba al sur de la ciudad, por ser la única que se conserva, es conocida actualmente como Arco de la Villa o Puerta de la Villa, cuyo estilo es propio del siglo XII o XIII, fecha de construcción del recinto amurallado.

Las otras dos eran la puerta norte o de San Adrián y la puerta mediana o de la Alameda.

 

En la puerta señala, en su parte norte, (la que da al interior de la ciudad) se aprecia un calvario pintado sobre madera, además posee una entrada en cuyo interior existe una angosta escalera que nos lleva a la única dependencia situada encima del arco, fue utilizada como cárcel de corregidores y posteriormente como prisión de la Villa.

El sur de la puerta tiene tres arcos abocinados, con un alfiz de ladrillo y arco rebajado.

La parte superior está coronada por seis ventanales de ladrillo.

- Torre de San Nicolás:Es una de las iglesias más antiguas de Coca, el primer dato documental conocido es de 1247. De ella sólo queda en pie una esbelta torre. Muy poco se sabe del trazado de su planta y de las características del alzado. En 1715 ya no poseía feligreses, aunque seguía manteniéndose como ermita rural. A finales del siglo XVIII queda completamente en ruinas y actualmente forman un pequeño túmulo en torno a la torre.

La torre está construida en mampostería y ladrillo, ha conservado parte del enfoscado renovándose continuamente. Es un ejemplo más de arte mudéjar en Coca. Fechada a finales del siglo XII, se levantó muy poco tiempo después de que en Coca se asentaran contingentes mudéjares. La torre es una imitación de los minaretes islámicos, primando la austeridad de sus líneas.

Su planta, cuadrada, la verticalidad de cada una de sus caras está recorrida por un machón que se estrecha en su parte más elevada. En la mitad inferior, se divisan cinco pisos de arquillos ciegos dobles, en número de tres a cada lado del machón, presentan el mismo esquema que se observa también en la mitad inferior de la torre de Santa María la Mayor. En la mitad superior, cuatro pisos de arquillos también dobles, en número de uno a cada lado del machón, están abiertos a fin de aligerar peso de la parte más alta.

- Verracos Vettones: Realizándose numerosas intervenciones arqueológicas por toda la geografía española, se han hallado gran cantidad de figuras zoomorfas. Al mencionarlas siempre se vienen a la cabeza los famosos Toros de Guisando, quizás las más conocidas, aunque las de Coca son de un tamaño muy inferior.

Únicamente existen tres, dos de ellas se pueden observar al pie de la muralla junto a la puerta de la villa sobre dos pedestales, la tercera figura se encuentra incrustada en la parte interior de la barrera perimetral del castillo, justo al lado del cubo de la muralla, que a su vez se encuentra engarzada a la fortaleza. Las figuras zoomorfas (pueden representar verracos u otro tipo de animales del orden de los rumiantes) están labradas en granito, su tipología arcaica es muy común en la cultura vetona, aunque el origen de estas es desconocido. La función que poseían no queda muy clara, pues bien podían servir para delimitar las áreas de pastoreo de la zona o cumplían una función mágico-religiosa: La supuesta protección y reproducción de los ganados.