Opinión

La Reina Letizia

"Doña Letizia es una mujer resuelta, que ha ido ganando de día en día: buena madre, enamorada de su marido-que se nota que lo que quiere es estar con él-, y dispuesta a echar una mano, o llevar consuelo, donde se le pida."

La Reina Letizia
La Reina Letizia GTRES

La Reina Letizia cumple años estos días. Es todavía joven y le queda un largo camino por delante. Buen momento para detenerse en su figura, su forma de afrontar la vida, inquietudes y silencios. Pero ¿Quién es esta mujer de su tiempo, que se hace cada día más presente en las alegrías y tristezas de los españoles y que acompaña, en todo momento, al Rey Felipe, en esta etapa decisiva de la Historia de España?

Pues, para empezar, habría que decir que Doña Letizia es una mujer resuelta, que ha ido ganando de día en día: buena madre, enamorada de su marido-que se nota que lo que quiere es estar con él-, y dispuesta a echar una mano, o llevar consuelo, donde se le pida.

A Doña Letizia no se lo han puesto fácil: se la ha escudriñado con lupa, se ha magnificado cualquier error y pasado de largo por sus aciertos, como mantener a raya a su familia, empeño y voluntad de servicio a España; dicen los que están cerca de ella, que lo ha pasado mal pero que, su sentido del deber, se ha impuesto siempre. Ha optado por aguantar, ser discreta y permanecer en su sitio.

Además, su condición de Reina de España, le impide enojarse o mostrar cualquier desavenencia, una lección que ha interiorizado, no sinesfuerzo, dada su firmeza de carácter. La Reina sabe muy bien cuales son sus obligaciones, al amparo de la Corona, para servir a los españoles y serles útil.

En estos momentos, ese es su principal cometido: ser provechosa, junto a su esposo el Rey, y educar a sus hijas. Sorprendentemente, los medios de comunicación extranjeros, han tratado a nuestra Reina mejor que los españoles. De ella han destacado, fuera de casa, además de su elegancia, el buen hacer para ofrecer esa imagen de estabilidad, dignidad y representación que refuerza la Monarquía y hacen que el Rey Felipe figure entre las personas mejor valoradas y apreciadas, dentro y fuera de España. Algo tendrá que ver la Reina en ello.

No quiero acabar esta gacetilla, sin destacar la naturalidad con la que Doña Letizia trata a las personas, a cada una en particular; el afecto que derrama en las distancias cortas y lo que disfruta hablando de las cosas corrientes del vivir. Esto se vio, por ejemplo, en la cumbre de la OTAN en Madrid.

La Reina fue clave para el buen desarrollo del encuentro de mandatarios internacionales. Doña Letizia, tuvo gestos cariñosos para todos y cada uno de los mandamás del mundo, reunidos en la capital de España.

Los 31 Jefes de Estado y de Gobierno y sus parejas, que habían acudido a Madrid, se fueron encantados de nuestros Reyes. Hay bastantes cosas que no se saben de la Reina, como la tarea oculta que viene desempeñando en la Asociación Española contra el Cáncer y otros proyectos humanitarios, en los que trabaja duro sin que trascienda.

A ellos dedica horas y horas, e influye positivamente con su buen olfato e iniciativas. Creemos que lo sabemos todo de Doña Letizia, pero es mucho más lo que desconocemos. Me quedo con lo que en verdad importa: el beneficio a la convivencia y la armonía que la Reina aporta.