La portavoz de la Generalitat pide “condiciones” y “garantías” para la mesa de diálogo

Esquerra no va a tener fácil reanudar la mesa de diálogo en julio. El partido comandado por Oriol Junqueras y Pere Aragonès tiene la intención de retomar el foro de negociación política con el mismo formato que tenía cuando se suspendió por la crisis del coronavirus, pero JxCat no parece dispuesto a ello y puede dinamitarlo con sus exigencias. En este sentido, después de que esté recobrando fuerza la petición de Carles Puigdemont de la figura del relator, la portavoz de la Generalitat y dirigente del partido neoconvergente, Meritxell Budó, ha dejado entrever esta mañana las dificultades que van a plantear pidiendo “condiciones” y “garantías”.

“Durante los próximos días se verán cuáles son las condiciones que deben de regir la mesa de diálogo. Siempre hemos dicho que el diálogo se debe retomar, que debe ser sincero y que debe tener voluntad y garantías de resolver el conflicto”, ha dicho la portavoz de la Generalitat. Budó ha evitado dar más detalles, pero la petición de garantías remite de nuevo a la exigencia del “relator”, que ya dinamitó los intentos de diálogo a principios de 2019 tras la minicumbre de Pedralbes y empujó a España a elecciones generales.

Quim Torra, por el momento, no se ha pronunciado en el Govern sobre la mesa de diálogo, aunque ya ha advertido de que para que se retome se debe de recuperar la “confianza” con Pedro Sánchez, una manera también de reclamar la figura del relator.

Mossos d’Esquadra

Budó ha reprochado la actitud de los agentes de los Mossos d’Esquadra que vejaron con insultos racistas a un ciudadano mientras le detenían. “Queremos denunciar los hechos deplorables y vergonzosos que manchan la imagen del cuerpo de Mossos. Creemos que hay que depurar estas actitudes que no se corresponden con una policía democrática”, ha asegurado la portavoz, que también ha precisado que es algo “minoritario” en el cuerpo policial y ha explicado que no se ha podido abordar en la reunión del Govern por la ausencia del conseller de Interior, Miquel Buch, que ha acudido a declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

Fondo de reconstrucción autonómica

La portavoz de la Generalitat también ha considerado insuficiente los 3.200 millones de euros que corresponden a Cataluña del fondo de reconstrucción autonómica de 16.000 millones de euros anunciado por el Gobierno. En este sentido, ha calculado que los efectos de la crisis del coronavirus han tenido un coste de 4.500 millones de euros para las arcas de la Generalitat -en torno a 4.000 por los costes sanitarios y el resto por la reducción en los ingresos-.