Música

Música

Abbey Road: el paso de cebra más famoso de la historia y el final de los Beatles

La amistad entre los miembros era ya por entonces ficticia y McCartney grabó él solo toda la suite final de la cara b

El año pasado se cumplió el 50 aniversario de una de las obras capitales de la música pop, un disco llamado “Abbey Road”, compuesto y grabado por The Beatles en 1969, cuando más o menos aún eran un grupo. Curiosamente, la última fase de su corta pero intensa carrera, está considerada por muchos críticos y fans como la más interesante y brillante, pese a las muy mejorables relaciones en el seno de la banda más famosa de la historia.

Como es habitual en estos casos, la efeméride vino acompañada por una lujosa reedición del disco, que hizo las delicias de los millones de fans completistas de The Beatles, pero hubo una cosa que seguía impertérrita al paso del tiempo: su emblemática portada.

La imagen con los Fab Four cruzando el paso de cebra fue tomada en, obviamente, Abbey Road, en su cruce con Grove End Road. El álbum fue grabado exactamente ahí, a una hora caminando desde Oxford Street. Tuvieron que cruzar cuatro veces el paso peatonal en ambos sentidos. Lo único artificial de la foto fue el corte del tráfico rodado, porque ni siquiera el vestuario estaba predeterminado. Cada uno de los Beatles iba vestido tal y como salió de su casa aquel día

Fue obra de John Kosh, quien ahora es diseñador, director y productor en Los Ángeles. Él era un diseñador de 23 años en el Teatro Real de Ópera de Londres a finales de la década de 1960 cuando recibió una llamada de John Lennon. “Pensé que era una broma”, recordó Kosh.

Lennon era seguidor de Kosh, y quedaron para hablar en el Hammersmith Hospital, aunque el fotógrafo seguía sin creérselo. Pero abrió la puerta y ahí estaba el autor de “Imagine”. Poco después ya estaban empezando a diseñar.

Cuando Kosh empezó a trabajar en el sello discográfico de los Beatles, Apple, observó la confusa que era esa etapa del grupo. Prueba de ello es que su primera labor fue la creación de la portada del disco “Get Back” -que más tarde se llamó “Let it be”- y que salió en 1970, mientras que “Abbey Road” es de 1969. Era muy evidente la frialdad existente entre Lennon, McCartney, Harrison y Starr.

“Get Back” tenía que ser el canto del cisne de los Beatles, su última grabación, pero de repente la inspiración volvió y regresaron al estudio para componer “Abbey Road”. No obstante, esa súbita “amistad” era bastante ficticia, lo demuestra que McCartney grabó él sólo toda la soberbia suite de la cara b.

 

Esa fase de inspiración provocó que tuvieron terminado el disco con inusitada rapidez. Un miércoles cualquiera llamaron desde la compañía discográfica, EMI, avisando que necesitaban una portada para el viernes. 2 días.

Kosh sabía que el fotógrafo escocés Iain Macmillan había tomado algunas fotos del grupo en el ahora famoso cruce. Solicitó las transparencias por mensajería y seleccionó la mejor para la portada. No ponía ni el nombre del disco ni del grupo.

Cuando el disco se publicó. empezó una de las rumorologías más famosas de la historia de la música. Para entenderlo, cabe recordar que en 1966 se difundió que Paul McCartney había muerto en un accidente de tráfico. Para seguir adelante, y en una época en la que dejaron de tocar en vivo, le habrían reemplazado por un doble. Una teoría que en 2020 no habría aguantado ni un minuto, pero que en cambió duró años, al menos hasta que se dio a conocer la portada.

Estas teorías rozaron o más bien superaron lo esperpéntico. Según los favorables al rumor, McCartney estaba muerto porque en la imagen va descalzo y fuma con la derecha, aunque él es zurdo. Lennon, con ropa blanca, se consideraba como un sacerdote. Ringo, con ropa negra, se veía como el director de funeraria. Y Harrison, con ropa de mezclilla, representaba a un sepulturero. Muchos años más tarde, el “fallecido” McCartney publicaría irónicamente un disco en directo llamado “Paul is live”.