Generalitat de Cataluña

ERC y la CUP estrechan el cerco y presionan a Torra para pactar la fecha de las elecciones

Se mantienen las discrepancias en el seno del independentismo ante la inminencia del debate de política general y la vista en el Supremo

Presentación del libro "Tornarem a vèncer"
El coordinador nacional de ERC y vicepresidente del Govern, Pere Aragonès junto a la consellera de Justicia, Ester Capella y el alcalde de Manresa, Marc Aloy, durante la presentación del libro "Tornarem a vèncer" de Marta Rovira.Susanna SáezEFE

Esquerra y la CUP han acabado uniendo esfuerzos con el objetivo de presionar a Junts per Catalunya y forzar a Quim Torra a pactar la fecha electoral ante la vista en el Supremo prevista para este jueves. Republicanos y anticapitalistas buscan un acuerdo sobre la bocina, un pacto “in extremis” que el entorno del president y del expresident Puigdemont rechazan. El primer acercamiento público fue ayer en una reunión telemática promovida por la CUP, que puso sobre la mesa la llamada “vía Venturós”: Torra, en caso de ser inhabilitado, que ejerza las funciones institucionales y representativas de la Presidencia, pero que las potestades administrativas y legales recaigan en el presidente en funciones, que sería el actual vicepresidente del Govern, Pere Aragonès. Eso sí, un escenario posible tras pactar una fecha concreta para los comicios.

“Constatamos que ha habido voluntad de llegar a un acuerdo de propuesta conjunta ante la falta de proyecto gubernamental, el agotamiento de la legislatura y el escenario de inhabilitación, entre los tres actores”, aseguraron anoche fuentes de la CUP. Sin embargo, el consenso parece lejos de alcanzarse: también ayer a última hora, el expresident Puigdemont defendió en una entrevista en TV3 que el Govern “no caiga” si el Tribunal Supremo acaba inhabilitando al presidente de la Generalitat, Quim Torra. “Una manera de plantar cara no es sólo expresar su malestar, sino que el Govern no caiga, que el Govern continúe, y que haya la necesidad de hacer justo lo que el Estado no quiere: que en plena pandemia, en plena emergencia sanitaria, económica y social, el Govern no puede estar decapitado”, aseveró Puigdemont.

¿Y Esquerra, socio de Torra en el Ejecutivo, qué dice? Los republicanos no paran de repetir a necesidad de consensuar una fecha electoral, una opción que defienden desde hace semanas con las encuestas a favor (en su particular batalla con JxCat) y la crisis por el coronavirus acechando de nuevo. “Por favor, acordemos la fecha de las elecciones y que sea la que mas convenga al país y la que permita después salir con una coalición fuerte que asuma este ‘mientras tanto’ muy duro y ponga los fundamentos de la república”, ha subrayado hoy Marta Rovira, la recuperada secretaria general de ERC con la vista puesta en una futura campaña.

Preguntada por si es mejor tener un nuevo presidente escogido en elecciones o uno que sustituya a Torra tras su inhabilitación, Rovira ha contestado que en un momento de crisis por pandemia es necesario que Cataluña tenga un Govern fuerte: “No podemos generar más desgobierno en Cataluña en este momento y, por lo tanto, lo que sea más efectivo para tener un Govern fuerte con un presidente al frente”.

También ha criticado que “está siendo realmente difícil encontrar con quién hablar” en JxCat para poder consensuar cómo responder a la inhabilitación del presidente del Govern.