Cataluña
Una batalla campal en las Fiestas de la Mercè desata el caos en Barcelona
La noche se salda con 20 detenidos, apuñalamientos, destrozos, una cuarentena de heridos y varias agresiones sexuales
Hacía tiempo que Barcelona no vivía una noche tan terrible. Las Fiestas de la Mercè están desbordando a la Guardia Urbana. Unas jornadas que tenían que convertirse en un espacio para el ocio juvenil en Barcelona tras tanto tiempo de severas restricciones por la pandemia, están dejando episodios de máxima violencia entre los jóvenes y desembocando en duros ataques a la policía. En total, el balance de anoche es de 20 detenidos, más de una decena de apuñalamientos, 43 heridos, se investiga una presunta agresión sexual, numerosos robos, quemas de coches y de los aledaños del recinto de Fira de Barcelona y un intento de asalto de la comisaría de la Guardia Urbana.
Al igual que el jueves, anoche, miles de jóvenes se concentraron en los alrededores de Plaza España y Avenida María Cristina, donde realizaron botellones. La Guardia Urbana ha contabilizado más de 43.000 personas en esta zona céntrica y turística de la capital catalana, que, sobre las 4 de la madrugada, ha desembocado en una batalla campal contra la policía. Barcelona está sufriendo en las últimas noches una seria crisis de seguridad ante grupos de jóvenes desenfrenados por el alcohol consumido durante los botellones.
Lo cierto es que ha habido mucho debate estas últimas semanas porque el Ayuntamiento de Barcelona exige la reapertura del ocio nocturno para evitar episodios incívicos, mientras que la Generalitat sigue sin dar el paso por temor a que el virus se descontrole en las discotecas ya que son espacios interiores.
La Guardia Urbana, en este caso, cuando empieza a actuar para desalojar a los jóvenes, se encuentra con reacciones de máxima violencia. Tanto es así que esta noche ha habido enfrentamientos contra la policía, con destrozos en coches de la Guardia Urbana y un intento tomar la comisaría de la Guardia Urbana de Montjuïc por varios centenares de jóvenes.
Pero además de plantar cara a la policía, también se han registrado violentos enfrentamientos entre grupos, que se ha saldado con apuñalamientos, quemas de coches y lanzamiento de motos desde el puente de Gran Vía. Muchos jóvenes han permanecido hasta primera hora de la mañana en los alrededores y, en algunos casos, también han dado problemas a los servicios de limpieza.
Desde el sindicato CSIF, a través de un comunicado, se ha criticado la actitud tomada por el Consistorio ante estos macrobotellones con consecuencias tan violentas. En este sentido aseguran, a través de una nota, que “la dejación de funciones por parte del Gobierno Municipal, tendría que ser objeto de investigación por parte de la Fiscalía de Barcelona. Como también se tendría que investigar al propio Jefe de Policía de la Guardia Urbana. La Policía no interviene porque sigue los criterios políticos y no los criterios policiales que deberían regir y aplicarse. Es vergonzoso como la Jefatura de la Policía no refuerza el turno de noche, uno de los turnos más castigados y con menos efectivos para hacer frente a la problemática con la que tiene que lidiar cada día”.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha pedido este sábado a Guardia Urbana y Mossos d’Esquadra que preparen un dispositivo policial de carácter “preventivo” para que no se repita el botellón de esta madrugada. “Lo que ha pasado aquí es inaceptable, absolutamente inaceptable, y que no tiene nada que ver con el incivismo, sino que ha habido un problema de vandalismo, de orden público y que no se debe repetir”, ha afirmado en declaraciones a los medios en la avenida María Cristina. Ha remarcado que en esta segunda noche de fiestas de La Mercè se ha dado un “salto de escala numérico” por los 40.000 asistentes al botellón -en comparación con los 15.000 que hubo el jueves por la noche-, aunque ha rechazado que la aglomeración estuviera relacionada con las actividades programadas por el Consistorio.
✕
Accede a tu cuenta para comentar