Colau se apropia de la bajada del precio del transporte público de Pedro Sánchez

En plena resaca de las elecciones andaluzas, el Gobierno de Pedro Sánchez ha pisado el acelerador, ha centrado su discurso en materia económica y ha aprobado este sábado un paquete de medidas anticrisis que incluyen una importante rebaja del precio del transporte público. Un plan de choque vigilado con lupa desde Cataluña, con el Govern tildando el anuncio de “populista” y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, apropiándose de la iniciativa.

En un comunicado, la primer edil y lideresa de los Comunes ha explicado que a finales de marzo ella misma propuso esta medida “de sentido común” al Gobierno y a la Generalitat para paliar el impacto de la inflación, y que fue rechazada tanto por la ministra de Transportes, la socialista Raquel Sánchez, como por el Ejecutivo de Pere Aragonès (ERC).

“Ahora el Gobierno rectifica y yo me alegro: sería una incoherencia subvencionar la gasolina del vehículo privado y no ayudar a quien emplea el transporte más sostenible”, ha añadido. “Ahora solo falta que la Generalitat se sume y que a partir del 1 de septiembre tanto metro, bus como los trenes de Rodalies tengan esa reducción del 50%, tal y como está haciendo Alemania hace semanas”, ha advertido con la vista puesta en el Palau de la Generalitat.

De hecho, Colau ha aprovechado el anuncio de la Moncloa para para exigir al Govern de Aragonès que después de vacaciones asuma el 20%del coste de los billetes de metro, bus y cercanías para poder garantizar el descuento del 50%. Y el Ejecutivo ya ha reaccionado vía el vicepresidente Jordi Puigneró (Junts), quien no ha dudado en tachar la medida de “populista” y de solución fácil para reclamar la cesión del servicio de Cercanías.

El Govern ha estimado que complementar la reducción para llegar al 50% de reducción supondrá para la Generalitat un desembolso de 22 millones de euros, por lo que ha criticado que se trata de una medida que el Gobierno ha tomado “de forma unilateral”, de la que el Ejecutivo catalán no estaba informado y que afecta a sus cuentas

En concreto, Pedro Sánchez ha anunciado la reducción a partir del 1 de septiembre del 50% del precio de todos los abonos de transporte estatal, como Renfe, y del 30% para los abonos de transporte que dependen de ayuntamientos y Comunidades Autónomas, y que pueden ampliar con recursos propios hasta el 50%. Es por ello que Colau presiona ahora para que Aragonès asuma su parte correspondiente (20%).

En marzo, la ex activista se desmarcó y propuso de forma unilateral rebajar temporalmente un 50% el precio de la tarjeta T-Usual, el título más utilizado en Barcelona, para ayudar a la “gente trabajadora” que viaja en transporte público ante el aumento del coste de la vida. “Trasladaré esta reflexión a las otras administraciones que tienen estas competencias”, aseguró por sorpresa en una entrevista de TV3.

“Colau se avanzó haciendo una propuesta que iba más allá de sus posibilidades sin encomendarse a nadie”, zanjó en este caso la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, acusando a la alcaldesa de ir por su cuenta.