Agresiones sexuales
El líder de la “manada de Castelldefels”: “Las chicas follarán con quién yo diga”
Los Mossos no descartan que haya más víctimas de los depredadores sexuales ya encarcelados
Prosigue la investigación sobre el K-Team, el nombre de la “manada de Castelldefels”, formado por cinco hombres que están en prisión provisional desde la pasada semana. Están acusados de tres salvajes violaciones a mujeres en un piso de la localidad.
Los Mossos no descartan que haya más víctimas, que es lo que se desprende del polémico chat de su grupo en Whatsapp, llamado precisamente “K-Team”. Todo se organizaba entorno a estas conversaciones, que servían para buscar mujeres, ponerse de acuerdo entre ellos, y todo econ el objetivo de humillarlas a todos los niveles, también el psíquico.
La Policía Auttonómica está convencida de que, tal y como sucede en este tipo de grupos “manada”, hay un líder, y en este caso es de nacionalidad cubana y responde al nombre de Alejandro Raúl P.C. Ello se desprende de los móviles intervenidos a unos hombre encarcelados sin fianza. Sucedió cuando fueron denunciados por una de las jóvenes, que señaló que estaba sola con ellos en un piso, con mucho alcohol y que fue forzada. “No te quejes, que te has comportada como una campeona”, le habrían dicho.
De esta manera, este líder dela “manada” ya se había empezado a encargar de captar chicas en los tiempos de pandemia. Las buscaba para fiestas en pisos, con la excusa de que los locales de ocio nocturno estaban cerrados. Se hacía todo a través de las apliacaciones Tinder y Badoo.
De la investigación y de estos chats también ha trascendido que aunque las chicas accedían a asistir a las fiestas, e incluso, según las conversaciones intervenidas de las víctimas con los presuntos agresores las chicas aceptaban algún tipo de prácticas sexuales, después de consumir alcohol y drogas, los hombres atacaban a las mujeres y las grababan, imágenes que después compartían por los canales de WhatsApp. Están acusados de dos delitos, agresión sexual y también revelación de secretos, por la filmación y posterior distribución de imágenes íntimas de las tres víctimas que hasta ahora se han podido identificar y han querido denunciar, según informan los Mossos. .
De las conversaciones intervenidas se desprende un profundo menosprecio por las víctimas, a las que se tratta como mercancía, sobre todo el “Cubano”. Definido como un “adicto al sexo”, ejercía un gran liderazgo dentro del pequeño grupo. “Follará con quién yo diga”, solía decir. Sin embargo, muchos de los mensajes comprometedores en los chats fueron ya borrados, evitando así más inculpaciones. También vídeos y mensajes de audio.
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