Gabriela Bravo

La Generalitat inspecciona 37 clubs y sanciona diez por incumplir las medidas anticovid

Bravo insiste en que para abolir la prostitución hay que cambiar la ley

La Generalitat inspeccionará 143 locales donde presuntamente se ejerce la prostitución
La Generalitat inspeccionará 143 locales donde presuntamente se ejerce la prostituciónlarazon

La Policía autonómica, en colaboración con la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía, va a inspeccionar los 143 establecimientos de la Comunitat Valenciana en los que se sospecha que se ejerce la prostitución.

Así lo ha anunciado la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, quien ha explicado que las inspecciones se hacen al amparo tanto de la ley de espectáculos autonómica, que permite sancionar a los locales donde se ejerza una actividad diferente a la que contempla su licencia, como del decreto ley autonómico de régimen sancionador de medidas contra la covid-19.

El dispositivo especial que se puso en marcha el pasado viernes ha permitido la inspección de 37 de estos locales (18 en la provincia de Valencia, 13 en la de Alicante y 6 en la de Castellón), y se ha propuesto sancionar a diez establecimientos.

De esos diez, seis tenían licencia diferente a la actividad ejercida y cuatro incumplían las medidas contra la covid-19, según fuentes de la Generalitat, que han precisado que cuatro locales de València cerraron tras la inspección y sus responsables aseguraron que no volverían a abrir.

La consellera de Justicia ha asegurado que la Generalitat “está actuando en el estricto marco de sus competencias” para afrontar un problema como el de la prostitución, para el que en su opinión hace falta un cambio legislativo “profundo”.

Por ello, Gabriela Bravo ha instado al Gobierno “a que aborde los cambios legislativos necesarios, con una ley integral contra la trata”, porque no se puede “consentir esa nueva forma de esclavitud”.

Ha explicado que es muy consciente de que la prostitución que se ejerce en estos locales “supone apenas el 20 por ciento” de todo el fenómeno y de que el Código Penal solo castiga el proxenetismo, de forma que “la única solución es la abolición de la prostitución, porque no es sino otra forma más de violencia y maltrato hacia las mujeres”.