La maldición persigue a las Fallas, se suspenden todos los actos de la mañana por el temporal

En las Fallas de 2020 la epidemia de covid obligó a cancelar, tan solo a días de sus celebración, todas los actos. Lo que vino después fue todavía peor, meses de confinamiento y miles de muertes y hospitalizaciones. En 2021 tampoco fue mucho mejor. Se suspendieron también las de marzo y se aplazaron a septiembre y llovió como no lo hacía en años. De hecho, desde entonces no se había registrado un temporal de lluvia y viento tan fuerte.

La Junta Central Fallera (JCF) de València ha anunciado que ha quedado suspendido el acto de recogida de los premios concedidos a las fallas grandes de la ciudad, que se iba a celebrar esta mañana, debido a la lluvia que está cayendo y que espera que continúe las próximas horas.

Estaba previsto que desde las 9:30 horas las distintas comisiones falleras de la ciudad desfilaran frente al Ayuntamiento de València para recoger los premios que el jurado ha otorgado a sus monumentos grandes.

Además, la mascletà de las Fallas de València que se iba a disparar este jueves en la Plaza del Ayuntamiento también ha sido suspendida, debido a la situación meteorológica de fuertes vientos y lluvias.

Esta es la tercera mascletá que se suspende en esta edición, la número 17 del ciclo fallero, la iba a disparar la Pirotecnia Aitana, si bien las precipitaciones que están cayendo desde la madrugada en la ciudad y la previsión de vientos que pueden alcanzar rachas de 70 kilómetros por hora han llevado a aplazarla.

Suspendido el acto de recogida de los premios, queda por ver cómo afecta la lluvia a una de las citas claves de las fiestas josefinas y el más multitudinario, la ofrenda de flores a la Virgen que, según el horario establecido, ha de comenzar a las 15:30 de la tarde y que se alarga hasta la medianoche, cuando hace su entrada la fallera mayor infantil de Valencia. A esta hora está previsto también el disparo de castillo de fuegos artificiales.

Las falleras han hecho acopio de plásticos para cubrir sus trajes e incluso se han agotado unas faldas transparentes para protegerlos de la lluvia.