Tribunales

La Audiencia de Valencia condena a Zaplana a diez años de prisión por el cobro de comisiones por adjudicaciones públicas

El ex presidente de la Generalitat valenciana cometió, según la sentencia, delitos de blanqueo de capitales, cohecho, prevaricación y falsedad en la denominada trama Erial

El expresidente de la Generalitat y exministro, Eduardo Zaplana, ha sido condenado a diez años y cinco meses de prisión por el cobro de comisiones en las adjudicaciones de las ITV así como de los sectores del Plan Eólico Valenciano.

El ministerio fiscal pedía diecisiete años de prisión. El tribunal no ha apreciado el delito de organización criminal pero ha aplicado grados medios en las penas por los otros hechos delictivos.

La condena a Zaplana se concreta en tres años y once meses de prisión, por un delito de cohecho; un año y seis meses, por el de falsedad, y cinco años por el de blanqueo de capitales, lo que suma un total de diez años y cinco meses de cárcel. Además de veinte años y diez meses de inhabilitación para empleo o cargo público.

Zaplana ha sido absuelto asimismo, del delito de organización criminal del que también era acusado.

Por su parte, los considerados socios de Zaplana, algunos de ellos, amigos desde la infancia, han sido condenados a un año y tres meses de prisión, como es el caso de Miguel Barceló por blanqueo de capitales; o a Francisco Grau, a la pena de cinco años de prisión por idéntico delito.

El jefe de gabinete del expresidente de la Generalitat, Juan Francisco García, quien llegó a una conformidad con el Ministerio fiscal y reconoció los hechos, ha sido condenado a penas de una año y medio de prisión por un delito de cohecho, y de un año de prisión por el de falsedad, además de cuantiosas multas y más de ocho años de inhabilitación.

La sentencia también condena a Vicente Cotino, sobrino del que fuera presidente de Les Corts Valencianes y más tarde, director general de la Policía Nacional, Juan Cotino. Las penas para el empresario Cotino que pagó las mordidas y que también alcanzó un acuerdo con la Fiscalía, son de dos años de prisión por cohecho; una año de prisión por falsedad y cinco meses por blanqueo de capitales. Es de suponer que en el acuerdo alcanzado con la Fiscalía, ésta no pedirá el ingreso en prisión.

El hermano de Vicente, José Cotino ha sido condenado a dos años de prisión por un delito de cohecho, en las mismas condiciones que la conformidad alcanzada por su hermano.

Por último, Francisco Pérez ha sido condenado a un año y seis meses de prisión por un delito de falsedad.

La sentencia es benévola para otros acusados. Así, absuelve al también expresidente de la Generalitat, José Luis Olivas, así como al abogado Saturnino Suanzes, a la secretaria de Eduardo Zaplana, Mitsouko Henríquez y también Robert Edgar Batauche, Carlos Gutiérrez Mondedeu o Francisco Pérez.

La Audiencia de Valencia considera probado que Eduardo Zaplana llegó a pactos con Juan Cotino, ex director general de la Policía, quien habría mostrado en una reunión en enero de 1997 su interés a Juan Francisco García Gómez (jefe de Gabinete del presidente de la Generalitat) y al propio Eduardo Zaplana "en que el Lote 1 (de las privatizaciones de las plantas de la ITV) fuera adjudicado a las empresas de su grupo (Sedesa) y Juan Francisco García Gómez hizo lo necesario, siguiendo las indicaciones de Eduardo Andrés Julio Zaplana Hernández-Soro, para que así fuera. El acusado Juan Francisco García realizó desde su posición política, como Presidente y Portavoz de la Comisión Interdepartamental para la Racionalización del Sector Público y como Presidente de la Mesa de Contratación de las adjudicaciones de las ITV, lo necesario para que se produjeran las adjudicaciones concertadas".

El grupo Sedesa, propiedad de la familia Cotino, obtuvo adjudicaciones tanto de las ITV como también del plan eólico, que luego vendió. Así, la empresa obtuvo ingresos por importe total de 86.511.400,15 euros con ocasión de la venta de sus participaciones en las sociedades Valenciana de Revisiones (ITV) y Proyectos eólicos valencianos, adjudicatarias de los precitados contratos públicos. A raíz de estos beneficios, Vicente Cotino y José Cotino, sobrinos del políticos efectuaron pagos a Eduardo Zaplana y a Juan Francisco García a través de dos vías: por una parte Imison Internacional que era una estructura "offshore" radicada en Luxemburgo; y por otra, Fenix Investment.

Zaplana siempre negó estos hechos y así, en el último turno de palabra dijo que "todos mis bienes los aporté estando en prisión, no hay más", y recordó que redactó un testamento "en los momentos más complicados" de su enfermedad.

"Tras registros, intervenciones, grabaciones, comisiones rogatorias y nueve meses de prisión digo lo mismo que dije, que no he cometido nunca ninguna ilegalidad al frente de la Generalitat y que nunca he tenido nuca dinero en el exterior", agregó y concluyó que "los recuerdos gratos superan a los ingratos, unos y otros los he intentado afrontar con responsabilidad y dignidad. Y hoy, en esta etapa tan difícil, sigo manifestando gran satisfacción por años de dedicación a la vida pública y a la presidencia de la Generalitat".

Sin embargo, su jefe de Gabinete, Juan Francisco García, reconoció en el mismo turno que negociaba una conformidad y que le recomendó confesar. "Todo lo que declaré es cierto", reiteró García, quien lamentó la acusación de "clandestinidad" lanzada por la defensa de Zaplana en alusión a los acuerdos con varios de los procesados. "La última vez que hablé con Zaplana fue en la casa de su hija en presencia de otro de los acusados. Le expliqué que, por indicación de mi abogado, estaba iniciando un proceso de acuerdo de conformidad y que, como amigo suyo, le recomendaba o le sugería que podría hacer lo mismo". "No voy a citar su contestación, pero le dije que debía pensar en él, en su familia, en personas como Mitsouko, Paco 'el Gasofa' o los hermanos Suanzes, porque su suerte iba a estar ligada a la suya".

El tribunal, presidido por Pedro Castellano, a la vista de la sentencia, no creyó las palabras del expresidente de la Generalitat, y sí las de su jefe de Gabinete.

Recurrirá la sentencia

Por su parte, el expresidente de la Generalitat ha anunciado este martes que recurrirá la sentencia que considera "basada en acuerdos opacos" y "sin evidencias" contra él.

En un comunicado difundido a través del despacho de su letrado, Daniel Campos, Zaplana se ha mostrado "decepcionado" por el pronunciamiento de la Audiencia Provincial de Valencia.

"A pesar de todo, sigo confiando en la Justicia y tengo la certeza de que tarde o temprano se reconocerá lo infundado de las acusaciones y, en consecuencia, recurriré a las instancias que sea necesario", anuncia.

Por último, el exministro se congratula por la absolución de quienes cometieron "el único delito" de ser sus amigos o colaboradores y "han tenido que sufrir un acusación igualmente injusta y soportar durante largos años la amenaza de una condena penal sin ningún fundamento".