La Conselleria de Educación pide al Ministerio que los alumnos valencianos de ESO tengan notas del 1 al 10

El conseller de Educación, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira, ha comparecido este jueves en Les Corts para explicar las principales líneas de trabajo de la Conselleria. Se ha comprometido a defender la "libertad ideológica" y la "libertad" para que las familias elijan el modelo educativo que quieren para sus hijos. Al respecto, ha explicado que la Conselleria trabaja ya en el diseño e implantación del distrito único escolar, con la previsión de que pueda entrar en vigor el próximo curso. Además, ha asegurado que trabaja ya en una nueva ley de Plurilingüismo que "garantice el estudio y conocimiento del valenciano, pero que deje atrás la imposición".

Según ha explicado, el objetivo es incentivar a los alumnos a que estudien valenciano ofreciéndoles la posibilidad de que se les expidan los certificados oficiales que se expedirán en el centro. No obstante, ha rechazado el plan del Botànic que pretendía que los alumnos exentos -que no han estudiado castellano- tuviesen que recibir dos asignaturas en esta lengua. "Las dos lenguas deben de ser tratadas en igualdad. Quien quiera estudiar todo en valenciano lo podrá hacer, y quien quiera todo en castellano también lo podrá hacer, aunque a la Conselleria le gustaría que todos conocieran el valenciano".

Otra de las novedades que ha explicado es la intención de recuperar la calificación numérica de las notas en la ESO. Ha recordadoque el Ministerio de Educación del Gobierno de Sánchez eliminó en 2022 para dejarlas en un "abstracto" Insuficiente, Suficiente, Bien, Notable o Sobresaliente. "Planteamos sumarnos a otras autonomías en las que la calificación numérica es una realidad, de manera que las familias tengan cuanta más información mejor sobre los resultados de sus hijos y donde además se reconozca y se premie el esfuerzo. No es lo mismo un 1 que un 4, ni un 9 que un 10".

Con respecto a las asignaturas, ha dicho que se recuperará la asignatura de música, "nunca debería haberse eliminado. Estudiaremos un nuevo currículum para reintroducir esa materia".

Proceso de adjudicación

También se ha referido también al proceso de adjudicación de plantillas docentes de este verano. Como ya explicó en agosto, generalmente el proceso de adjudicación de vacantes está concluido entre el 31 de julio y los primeros días de agosto. Curiosamente, este año el Gobierno del Botànic programó para entre el 27 y el 31 de julio la entrega de los listados de los opositores que habían aprobado. Por otro lado, el Ministerio remitió el listado del proceso de estabilización extraordinario el 1 de agosto, "en un documento excel y con errores".

Además, reiteró que la consellera saliente, Raquel Tamarit, firmó el 10 de julio el cese de una serie de funcionarios públicos implicados directamente en el proceso de adjudicación de plazas, ceses que en algunos casos se hicieron efectivos el 21 de julio y otros el día 31, el mismo día en que llegaron las notas de las oposiciones”.

Rovira, que pidió disculpas a los interinos, acusó al Botànic de trazar un plan preparado para provocar este caos. Ha relatado que tras las elecciones, el anterior Consell cesó a petición propia a 66 jefes de servicio, directores territoriales y subdirectores generales, de los cuales 27 fueron en la Conselleria de Educación -los 3 directores territoriales en Alicante, Castellón y Valencia, 15 jefes de servicio y 9 subdirecciones generales de las 13 existentes-. Además, todos ellos tenían responsabilidad en mayor o menor medida en los procesos donde se han producido los problemas. "Solo como muestra de la diferente forma de entender el servicio público entre mi partido y el anterior Ejecutivo, decir que, en el mismo periodo transitorio de cambio de gobierno en el año 2015, el Gobierno saliente solo cesó a 9 altos funcionarios, y ninguno pertenecía a la Conselleria de Educación, al anteponer el derecho a la educación al interés partidista".

A la falta de personal, se añadió, la obsolescencia del programa informático que fue incapaz de asumir las circunstancias extraordinarias de este proceso y de la que ya se había alertado incluso con una publicación en el BOE en agosto de 2020.

Por su parte, el portavoz de Educación, Gerard Fullana, le ha echado en cara que no haya sido capaz de gestionar el proceso de adjudicaciones, aunque no hizo referencia sobre la manera en la que la Conselleria está manipulando de manera manual las adjudicaciones, como ha denunciado en varias ocasiones.

Problemas con el autobús

El conseller se ha referido también a los problemas en algunas líneas de transporte escolar, y ha recordado que la Conselleria ha abierto un expediente sancionador a la empresa incumplidora por todas las incidencias ocurridas. “Dejar a un niño esperando el bus no es de recibo. Mucho menos si se trata de un menor con diversidad funcional”. Así, ha explicado que la Conselleria “está en contacto permanente con los centros afectados, con la Dirección General de Transportes y la Entidad Metropolitana de Transportes para posibles soluciones si continuaran los problemas, que cada vez son menores”.

Ha insistido en que ha recibido las adjudicaciones realizadas por el anterior equipo de la Conselleria, por lo que se ha mostrado sorprendido de que Fullana estuviese por la mañana manifestándose junto a un grupo de padres y madres, en lugar de estar en el pleno de Les Corts que se estaba celebrando.