Amamantando la vida

Qué alimentos se pueden tomar para aumentar la producción de leche

Sería maravilloso que bebiendo una infusión o tomando un determinado alimento la leche «subiera» como loca o «bajara»

Qué alimentos se pueden tomar para aumentar la producción de leche
Qué alimentos se pueden tomar para aumentar la producción de lecheLa Razón

Sopas, avena, chocolate caliente, té de hierbas, hinojo, tilo, anís, comino, la manzanilla, el romero, la canela, el tomillo, el jengibre, la cúrcuma, la leche de almendras, la cerveza. La listas de alimentos de los que se habla para aumentar la producción de leche en la madre lactante es tan larga como la de cada amiga que puedas tener. Nuestra cultura moderna no considera «normal» que el bebé este continuamente prendido al pecho justificando, que la causa más probable, de que el bebé demande constantemente sea una baja producción de leche.

A raíz de ello, surgen cientos de remedios para conseguir más leche.

Antes de hablar de los más extendidos hay que explicar qué son los galactogogos. Bajo este nombre tan exótico, se ocultan todas aquellas sustancias, que parecen ayudar en el inicio, mantenimiento o aumento de la producción láctea.

Sería maravilloso que bebiendo una infusión o tomando un determinado alimento la leche «subiera» como loca o «bajara» porque todavía no nos hemos puesto de acuerdo en si la leche sube o baja.

Aquí en España solemos decir que la leche «sube», pero en otros países, especialmente latinoamericanos, se dice que «baja». De cualquier modo, hablamos de lo mismo, de un mecanismo que se pone en marcha justo cuando la placenta se separa del útero, y a posterior es suficiente con mantener al bebé al pecho todo el tiempo que desee para mantener una adecuada producción láctea, ya que a más succión durante las primeras horas de vida mejor establecimiento de la lactancia, y producción de leche habrá. Recomendar cualquier alimento o sustancia para aumentar la producción de leche, esta cargado de buenas intenciones, pero de nulos o reducidos efectos, los estudios que avalan que el aumento de producción de leche es atribuible a la toma de galactogogos son escasos.

Los mitos más extendidos sobre alimentos y bebidas para producir más leche son los siguientes.

Beber mucha agua

La madre producirá leche con independencia de que beba más o menos agua. Sin embargo, las madres en período de lactancia necesitan tomar líquidos para mantenerse hidratadas; el mejor indicador de la cantidad de líquidos que la mujer requiere es la sed, por esto es importante que consuma agua, leche o zumos cada vez que sienta sed, pero sin olvidar que la producción de la leche se garantiza por la succión del bebé, no por la cantidad de líquidos que ingiera.

Beber leche

Uno de los mitos muy arraigados es que la madre lactante debe de tomar mucha leche para aumentar su propia producción. Las vacas producen leche y toman hierba, no leche. Un mayor consumo de leche no va a aumentar su producción.

Caldos o sopas

Se trata de un mito que se mantiene de épocas en la que los alimentos escaseaban, y el ofrecer la famosa sopa de pollo/caldo de gallina a una parturienta era un lujo de no muy difícil acceso, y una buena forma de reponer y aumentar las fuerzas de la extasiada madre. Lo mismo podríamos decir de los frutos secos, como almendras, avellanas, ricos en grasas saludables, proteínas, vitaminas y minerales

La cerveza

La creencia de que la cerveza aumenta la producción de leche esta todavía hoy muy extendida. Es fundamental tener en cuenta que el alcohol realmente puede reducir la producción de leche, y que los efectos de la cerveza sobre la producción láctea, parece ser que, son debidos a la cebada (componente de la cerveza, también presente en la cerveza sin alcohol), no obstante, cabe decir que no hay estudios que asocien el consumo de cerveza con una mayor producción de leche.

Infusiones y plantas

Una gran variedad de productos herbales se emplean en muchas culturas desde la antigüedad, para aumentar la producción láctea. Su difundido uso tranquiliza respecto a la seguridad y ausencia de toxicidad, que no siempre es cierta, ya que no existe una estandarización en la preparación de las dosis, a la vez, que cabe destacar que algunas de las plantas o compuestos que se venden como galactogogos pueden ejercer el efecto contrario, es decir, que, en vez de aumentar, más bien pueden inhibir la producción o ser perjudiciales para el bebé si su madre los consume en exceso.

¡No hay que dejarse engañar! Desgraciadamente para muchas mujeres que presentan problemas con la lactancia, los galactogogos pueden suponer una solución rápida, pero no se ha conseguido demostrar que ningún alimento o bebida tenga “poderes” mágicos para aumentar la producción de leche. El mejor galactogogo es un buen enganche y tomas muy frecuentes. Cuanto más succione el bebé del pecho, más cantidad de leche se producirá puesto que la succión estimula la síntesis de prolactina y de oxitocina. Por tanto, la lactancia a demanda y de forma exclusiva es el mejor sistema para incrementar la cantidad de leche.